La presentación en sociedad del Fiat 500X ha marcado un punto de inflexión en la firma italiana. Cuando el 500 estándar se comercializó a finales de la pasada década marcó un registro tan importante, que nadie se imaginó que poco más de media década después, el éxito recaería en el 500 más grande posible.
El 500X continúa la senda del éxito del 500L y demás variantes de gran tamaño y que poco o nada tienen que ver con el 500 original. Con el último en llegar y posicionado como mucho más que una versión con tintes off-road, el 500X tiene todo lo necesario para tener tanto éxito como el pequeño utilitario italiano, incluyendo variantes como podría ser el 500X Coupé.
Un crossover de tres puertas y compacto, ¿por qué no iba a triunfar?
Si hay algo interesante respecto al mercado de los crossovers, es la gran versatilidad y capacidad de expansión que presenta. Es un sector en constante cambio donde las posibilidades son muy amplias, incluyendo variantes de esta guisa que por supuesto, en Europa y España pueden cosechar un éxito rotundo. Al igual que Land Rover con el Range Rover Evoque, Fiat puede aprovechar al máximo el mercado con una variante de estas características. Jugando eso sí en un mercado muy diferente al del mencionado Evoque.
Echando un vistazo a los posibles rivales, el 500X Coupé prácticamente crearía un nuevo nicho de ventas aprovechando que los crossovers asequibles y compactos con 3 puertas, brillan por su ausencia.
Ilustraciones: Theophilus Chin
Otro 500 para otro Mini.
Aquí, el campero coupé de Fiat, a machete a por el Paceman. Ya que ambos se venderán menos que los dedos de una mano de un ebanista jubilado por accidente laboral, podrían haber ido todas a una y siempre lo diré: cabrio tendría una desdicha menos traumática y el doble de originalidad y encanto.