Honda ha puesto al día su monovolumen híbrido con novedades que van desde una actualización de su mecánica híbrida así como la introducción de una versión de aspecto deportivo -que no de pretensiones deportivas-.
En lo que respecta al aspecto mecánico, su configuración híbrida continúa siendo un motor híbrido autorrecargable (HEV), donde se aumenta la potencia del motor eléctrico en 11 CV, llegando a los 122 CV, con los mismos 131 Nm de par. El motor eléctrico que actúa como generador recibe 11 CV adicionales y el motor gasolina de 1,5 litros, recibe 9,5 CV extra. Esto le permite ganar capacidad de remolque, pudiendo ahora tirar de hasta 500 kilogramos, una cifra que sin ser muy alta, sí que posibilita mover remolques de bicicletas o motocicletas.
Por su parte, el nuevo acabado Advance Sport recibe el color de carrocería gris Urban Gray, parrilla y defensa delantera específicas así como también unas llantas de aleación de 16 pulgadas exclusivas de este acabado. No pasan por alto las caracasas de los retrovisores en acabado negro brillante, mientras que en su habitáculo encontramos unos asientos con tapicería que combina cuero sintético y ante sintético, un nuevo volante de tres radios y costuras en contraste de color amarillo para las molduras de las puertas y reposabrazos central.
Toda la gama se beneficia además de mejoras en el sistema de asistencia Honda Sensing con un asistente de atascos que ofrece ayuda en la dirección desde parado y una cámara con mayor ángulo de visión.
La comercialización debería arrancar a comienzos del presente año, aunque todavía no se han dado a conocer los precios para nuestro mercado.