La electrificación no está yendo a la misma velocidad en todos los países y es algo que quieren capitalizar los fabricantes chinos con la ofensiva de vehículos híbridos enchufables que están lanzando al mercado.
En el caso de la joint venture firmada entre Geely y Renault dos años atrás, ya podemos ver los primeros resultados de la misma. Recordemos que crearon una empresa junta denominada HORSE Powertrain Limited para producir motores de combustión interna, cajas de cambios, sistemas híbridos y baterías, con el objetivo de producir 5 millones de motores anualmente. HORSE suministrará a marcas como Geely, Volvo, Proton, Nissan, Renault y Mitsubishi.
Y lo más interesante es que acaban de revelar un motor con tecnología Range Extender. Una tecnología por la que no se ha apostado de manera masiva en esta transición pero que resulta muy interesante por diferentes motivos.
Se trata de un motor gasolina muy compacto desconectado de las ruedas y mecanismos de transmisión con una potencia de 68 CV (turismos) y 108 CV (comerciales) para alimentar un generador que es el encargado de cargar la batería. La ventaja de este motor es que funciona en un rango de revoluciones bajo para mantener un nivel de carga constante de batería, algo que le permite no sólo contar con un consumo muy bajo (y por ende, de emisiones de CO2), sino que además también implica transmitir menos vibraciones al habitáculo además de un menor desgaste mecánico.
Según afirman, con el generador eléctrico y la batería, la autonomía llega a los 200 km, mientras que gracias al uso dle motor de combustión se añaden 600 km adicionales de autonomía, dando como resultado más de 800 km sin repostar.
HORSE considera que esta solución resulta muy interesante al conseguir reducir el tamaño de las baterías de los vehículos, redundando en un peso muy inferior en su conjunto así como en sus costes productivos.
