Los usuarios de la autopista de peaje (AP-7) que discurre entre Tarragona y Alicante así como los de la AP-4 entre Sevilla y Cádiz desde hoy día 1 de Enero de 2020 ya no tendrán que pagar por circular en dichas vías, dado que la gestión pasa ahora a manos del Ministerio de Fomento, que será quien tome las riendas del mantenimiento del total de 468 kilómetros que conforman este levantamiento (74 de la AP-4 y 374 de la AP-7). Si bien es cierto que aunque por el momento su uso «es gratuito», el gobierno ya ha lanzado varios globos sonda para tantear cómo se van a mantener en un futuro este tipo de vías.
Este levantamiento de peajes atiende a la decisión adoptada por el actual Gobierno en funciones de no renovar las concesiones que gestionaba Abertis, pasando por tanto a ser gratuita la AP-7 entre Tarragona y Alicante tras 48 años de pago de peajes. Esta concesión entre Salou (Tarragona) y Valencia así como Valencia-Alicante fue inicialmente concedida a Aumar (Autopistas del Mare Nostrum) por un plazo de 27 años en 1974, venciendo en 1998, si bien se ha estado prorrogando hasta la fecha.
De esto se beneficiarán tanto usuarios particulares como profesionales, especialmente aquellos transportistas que cubren rutas de proximidad entre Valencia, Alicante y Castellón donde debido a los altos costes que les suponía, evitaban el uso de dicha vía a fin de poder ahorrarse el peaje. La Federación Valenciana de Empresarios del Transporte (FVET) ha cuantificado entre el ahorro anual 2.000 y 2.500 euros por vehículo.
Esto implicará una redistribución del tráfico de las nacionales que van en paralelo a ellas, como es el caso de la N-340 y N-332 en el caso de la AP-7 o la N-IV en el caso de la AP-4, algo que mejorará la calidad de vida de los residentes de los municipios que atraviesan dichas nacionales, además de las condiciones de seguridad vial, si bien, desde Fomento ya han informado que será necesario adaptar estas vías a la mayor intensidad de tráfico a las que van a ser sometidas.
Las barreras actualmente se encuentran levantadas, si bien, las playas de peaje todavía no han sido desmanteladas, ya que esto se llevará a cabo mediante un contrato de emergencia hasta la adjudicación de los contratos de conservación y mantenimiento que se han licitado.