Lo que ves en pantalla es la tercera generación del Porsche Panamera. Y sí, al menos estéticamente podrías llegar a pensar que se trata de un mero lavado de cara, pero nada más lejos de la realidad. Los cambios son muy profundos.
Nos tenemos que remontar al año 2009 para la primera generación del Panamera que no fue hasta el año 2013 cuando recibió un lavado de cara. En 2016 llegó la segunda generación que fue posteriormente actualizada en 2020. Y ahora estamos aquí, con la tercera generación.
Llega con dos longitudes de carrocería, estándar con 5,05 metros de longitud y Executive 5,20 metros de longitud. Y lo hace con tres versiones: Panamera, Panamera 4 y Panamera Turbo E-Hybrid. Las dos primeras cuentan con el motor V6 de 2.9 litros y 354 CV con propulsión trasera y tracción total, y el último es la versión híbrida enchufable con motor V8 de 4.0 litros y 680 CV de potencia.
Pero ahí no terminará la gama, puesto que también habrá versiones híbridas enchufables de los Panamera 4 y Panamera 4S con el motor V6, además de una versión híbrida enchufable con el motor V8 (Panamera Turbo S E-Hybrid). En todos ellos es común la tracción a las cuatro ruedas y una batería de 25,9 kWh de capacidad bruta, ofreciendo como mínimo una autonomía homologada por encima de los 75 kilómetros.
Estéticamente, encontramos un frontal completamente renovado, con unos faros LED matrix con una nueva forma que acompaña a las curvas de los pasos de rueda delanteros, además de unas tomas de aire que cobran mayor protagonismo. La vista lateral muestra unas llantas opcionales de hasta 21 pulgadas con bloqueo central que nos recuerdan a las del 911 GT3.
Ya en su zaga, encontramos una línea de techo inclinada con un alerón retráctil con apertura en dos etapas y una fina línea que recorre de extremo a extremo con las luces LED traseras.
Y… ¿qué hay en su interior? El cuadro de instrumentos es ahora una pantalla curva de 12,6 pulgadas que replica las cinco esferas clásicas de la marca. La pantalla táctil central es de 10,9″, que acompaña a otra en el lado del acompañante (opcional) con el mismo tamaño.
El selector del cambio está ahora ubicado en el volante con un estilo que nos recuerda al selector mannetino.
Sigue contando con carga inalámbrica para móviles (refrigerada, para reducir el estrés térmico que sufren en este tipo de carga), mientras que los controles de climatización y salidas de aire han sido rediseñadas.
