El icónico todoterreno ruso Lada 4×4 (antes Lada Niva), ha recibido una actualización para afrontar el año 2020. Este modelo que data de 1976 y que se ha mantenido con tan pocos cambios hasta la fecha todavía sigue teniendo fuerza para seguir cumpliendo años.
Este modelo es todavía una opción para muchas personas en algunos mercados concretos por su bajo precio y sencillez mecánica. Es por ello que Lada ha optado por modernizar superficialmente algunos aspectos.
El primero de ellos, su habitáculo, que actualiza su instrumentación con luz blanca para el tacómetro con un ordenador de a bordo que adopta nuevas funcionalidades, además de estrenar nuevos controles para el sistema de climatización, nuevas salidas de aire más grandes, salpicadero rediseñado, dos nuevos portabebidas en el túnel central y una consola con dos nuevas tomas de 12 voltios. Los asientos son de nueva factura y aseguran que ahora son más cómodos. Si optamos por la variante de tres puertas, se ha mejorado el sistema de plegado de los asientos delanteros y la segunda fila de asientos recibe dos reposacabezas, siendo por tanto más seguro para los ocupantes de las mismas. Finalmente, se estrena también un nuevo sistema de iluminación interior así como nuevos parasoles.
También aseguran que han mejorado el aislamiento interior, por tanto, deberían ser menos perceptibles las vibraciones y ruido que se introduce en el habitáculo, algo que se logra gracias al empleo de nuevos materiales fonoabsorbentes en la carrocería y nuevos soportes de motor.
El motor continúa siendo el mismo 1.7 inyección atmosférico de 4 cilindros y 84 CV de potencia con 129 Nm de par máximo, acoplado a una caja de cambios manual de cinco velocidades y tracción total 4WD.