Recientemente Lamborghini recibió la irresistible y poco común invitación para exponer su última obra de arte nada menos que en el histórico museo Chiostro del Bramante situado, tal y como deberías saber, en la magnífica y emblemática ciudad de Roma.
Pues bien, ante esta inesperada invitación decidieron, como no, aceptar y enviar su última joya de la corona italiana a tan emblemático e histórico museo aunque, una vez allí lamentablemente se dieron cuenta de que era muy difícil meter el vehículo en la habitación designada para su exposición, digo muy difícil y no prácticamente imposible porque, aunque no lo creas, al final lo hicieron.
Ahora bien, ¿cómo lo hicieron? Pues básicamente Lamborghini no podía hacer la exposición si su último modelo por lo que no era una opción descartar su presencia, algo que consiguieron básicamente con un prodigioso equipo de ingenieros que ni cortos ni perezosos decidieron llevarse un Aventador desmontado desde fábrica así como todo un equipo de herramientas y grúas para su posterior montaje dentro de la habitación.
Quizás, a mi parecer, el video vaya demasiado rápido pero como es lógico un Aventador no se monta en algo más de 2 minutos. Aun así, espero que disfrutes de esta peripecia.
Vía: youtube
Los quiero ver es desarmandolo para llevarselo de vuelta.