No podemos decir que este sea el primer todoterreno de Lamborghini (para ese menester, ya parió en su día el LM002), pero sí que es el primer SUV de la marca: ante todos vosotros, el Lamborghini Urus 2018 de producción. Ponemos, de esta forma, fin a todos esos meses de incesantes rumores, fotos espía, teasers y controversias por el hecho de haber sucumbido también a este segmento que no parece tener fin.
Eso sí, no podemos decir que estemos decepcionados en absoluto con el resultado: su estética es espectacular y no nos cabe duda de que logrará batir récords de ventas y lograr posicionarse como uno de los referentes de los SUV deportivos de altas prestaciones a nivel comercial. Precisamente, parte de su espectacularidad se la debe a la fidelidad que mantiene con el prototipo, con algunos cambios menores pero manteniendo muy bien sus líneas e incluso, diríamos a nuestro juicio, que mejorándolas.
Está construido sobre la plataforma MLB Evo que emplean también modelos como el Porsche Cayenne, Bentley Bentayga o Audi Q7 y su peso total se cifra en 2.154 kilogramos, para los que nos encontramos unos discos de freno carbocerámicos que son los encargados de detener al conjunto. La suspensión de serie es neumática, permitiendo modificar la altura de la carrocería nueve centímetros entre extremos y en opción podemos montar un sistema de dirección a las cuatro ruedas.
Por el momento sólo llega con un único motor, un V8 de 4 litros con doble turbocompresor y 650 CV con 850 Nm de par. Es el mismo motor que emplea por ejemplo el Porsche Cayenne Turbo. Para transmitir la potencia, lo hace a través de una caja de cambios automática con convertidor de par de ocho velocidades y un sistema de tracción total, pero vayamos a las cifras, que es a fin de cuentas lo que nos interesan de todo este baile de datos técnicos: un 0-100 km/h de 3,59 segundos y una velocidad máxima de 305 km/h lo catapultan a ser uno de los SUV más rápidos que hay actualmente en el mundo producidos en serie (con permiso del Tesla Model X).
En construcción.