Land Rover ya ha hecho oficial el sustituto del Frellander, bajo el nombre de ‘Discovery Sport’. Llegará a España con cuatro acabados diferentes y a un precio de partida de 36.350 euros, es decir, resulta considerablemente más caro que el Freelander al que reemplaza -al menos por ahora-, pero también es cierto que supone un cambio muy radical enmuchos aspectos que pueden justificar dicho sobrecoste.
Diseño exterior e interior
Realmente, su aspecto no nos coge de improvisto. Anticipado por el Discovery Vision Concept y posteriormente filtrado a través de unas maquetas a escala, el Discovery Sport muestra un gran semblante con el Evoque, una de las gallinas de los huevos de oro de LR en la actualidad, y precisamente por eso, han querido hacer un producto similar, bajo la premisa de «si algo funciona, no lo toques».
El semblante con el Evoque queda especialmente patente tanto en las ópticas delanteras como posteriores, donde juega con un estilo muy similar. En la vista de perfil es donde se dejan de forma más patentes las diferencias, ya que prescinde de la línea coupé que tan característica es en el Evoque para postar por unas lunas de mayor tamaño, a las que acompaña un pilar C donde cuenta con un amplio protagonismo. La carrocería exterior contará con una paleta de colores formada pro hasta 10 opciones.
Su salpicadero sí que es cierto que apuesta por un diseño más bien conservador, con una consola que presenta poca inclinación en comparación con otros modelos de la firma. No podemos dejar pasar por alto la segunda fila de asientos, que es opcional a fin de ofrecer hasta siete plazas. Si bien, como suele ser habitual en este tipo de modelos, el espacio para las piernas resulta muy limitado.
Mención especial requiere la posibilidad de montar un sistema HUD (Head Up Display).
Cotas y chasis: los detalles
Respecto al Freelander, pierde en algunas cifras de las cotas. De los 4.65 metros pasa a medir ahora 4,59 metros de largo. Estrena una plataforma nueva, que cuenta con un eje trasero multibrazo a fin de asegurar un mejor comportamiento dinámico en carretera, permitiendo aumentar la capacidad de carga de su habitáculo y dar cobijo a la tercera fila de asientos.
La carrocería por su parte está elaborada tanto en acero (de muy alta resistencia) como en aluminio, empleando este último en algunos paneles de la carrocería a fin de reducir el peso del conjunto, como el techo, portón trasero, aletas y capó delantero. Si bien, por el momento, no conocemos el peso, aunque es muy posible que tenga un peso más contenido que el actual Freelander.
Gama de motores inicial: todos de cuatro cilindros
La gama de motores que encontraremos en el modelo inicial estará formada por tres únicas opciones, opciones que por otra parte ya encontramos en el Evoque. Se tratan de los TD4 de 2.2 litros y 150 CV y el SD4 de 190 CV de inyección directa. Ambos equipan de serie frenada regenerativa así como sistema Stop&Start de arranque y parada automático. El par máximo en ambos es idéntico: 420 Nm. Esto en lo referente a propulsores diésel, ahora toca el de gasolina, que será el SI4 de 240 CV e inyección directa, para aquellos que busquen un mayor nivel de prestaciones.
Habrán disponibles variantes con tracción 4×2 y 4×4, incluyendo, más adelante, la llegad ade una variante eD4 pero con medidas para ser más eficiente y lograr reducir su consumo hasta los 118 g/km. Las cajas de cambio disponibles en ellos serán una manual de seis velocidades o una ZF de nueve velocidades (que será de serie en el propulsor gasolina).
Equipamiento: Nuevas introducciones
El Discovery Sport sienta también una distancia considerable respecto al Freelander en materia de equipamiento, ofreciendo posibilidades de equipamiento mucho más amplias tanto a nivel de seguridad como de entretenimiento a bordo.
En lo que respecta al sistema de infoentretenimiento, además de estar formado por una pantalla táctil de 8 pulgadas, encontramos en opción el sistema ‘InControl’ que nos permite visaulizar algunas de las aplicaciones que tenemos instaladas en nuestro móvil a través de la pantalla.
En materia de seguridad, por su parte, encontramos sistemas de reconocimiento de señales, alerta de cambio involuntario de carril, asistente de aparcamiento que nos permite aparcar tanto en batería como en línea, sistema de frenado de emergencia, o, incluso, airbag para peatones, siendo el primer Land Rover en incorporarlo y de los primeros coches en la industria en contar con él.
Land Rover Discovery Sport
El exterior, sobretodo, el frontal, me gusta bastante. La zaga, a pesar de contener esos pilotos tan exagerados, se prestan bien resueltos para que, sean consecuentes con la gran luneta integral trasera ya que muerde prácticamente todo un cuarto trasero lateral de chapa.
El interior lo veo muy soso, no despliega ese aire de modernidad que de última tendencia esperaba.
Tecnología a la última y mecánicas racionales. Buen producto, no hay duda.