Alemania ha dado un importante paso para la adopción del coche eléctrico en Europa con el anuncio de la obligación de instalar puntos de carga para coches eléctricos en las gasolineras. Y es que, por ley, el 80% de estaciones de servicio deberán contar con varios cargadores. El anuncio ha sido realizado por el canciller alemán, Olaf Scholz, durante el reciente Salón de Múnich de 2023.
Recordemos que el objetivo que tienen es el de conseguir que para 2030 circulen por sus carreteras 15 millones de vehículos eléctricos, frente a los 1,2 millones que circulan en la actualidad. Y para ello, es indispensable aumentar la red de carga pública actual, con 90.000 cargadores y que gracias a medidas como esta pasaría a ser de 1.000.000 para 2030.
Pero ahí no acaba el asunto, porque de nada serviría una medida de este tipo si esa red se confecciona con cargadores potentes. Por ello, el mínimo de potencia que deberá ofrecer esta red obligatoria será de al menos 150 kilovatios, por lo que unido a la enorme dispersión existente en la red de estaciones de servicio que suele haber en la gran mayoría de países, esto permitirá reducir considerablemente las preocupaciones relativas a la autonomía por la falta de puntos de carga, tanto por la potencia como por la distancia existente entre ellos.
¿Cuánto tardarán otros países de la Unión Europea en aplicar medidas similares? no creemos que tardemos mucho en verlo, aunque sea legislación mediante o no, teniendo en cuenta la prohibición en la venta de vehículos con motores de combustión para 2035, será una transición natural que tarde o temprano muchas estaciones de servicio tendrán que acabar dando.