Con la producción del Tesla Model 3 -en pantalla- yendo viento en popa y a punto de cumplir las expectativas de fabricar hasta seis mil unidades semanales a partir de junio, en Tesla ponen ya el horizonte en competir a nivel global no solo con el actual Model 3 como único modelo generalista, sino también con el Model Y.
Este proyecto ya fue anticipado en guisa de boceto preliminar, algo que nos sirvió de poco ya que el diseño definitivo y el modelo en sí siguen siendo un absoluto misterio. Lo que sí podemos sacar en claro, más allá de la atención que está recibiendo actualmente el hatchback estadounidense, es que el Model Y llegará antes de lo previsto. Si la fecha inicial era finales de 2019, ésta se adelanta a los dos primeros cuatrimestres del mismo año. Eso no es todo, ya que antes de las próximas navidades, la marca de Elon Musk y sus chicos podrían anticiparlo en guisa de prototipo pre-producción.
Como apunte interesante, el Tesla Model Y incorporará interesantes mejoras y tecnologías mejoradas a pesar de tomar como punto de partida una versión renovada del chasis que instala el Model 3. Esta decisión, recordemos, fue tomada casi a última hora con el objetivo de no retrasar el lanzamiento del Model Y más allá de inicios de la próxima década. Es vital que ambos modelos generalistas compartan línea de montaje antes de que termine el actual lustro, y parece que el objetivo se cumplirá en ruta.
Por el momento, la novedad más significativa que ya se pudo confirmar es el uso de las baterías de litio-ión para los elementos auxiliares del Model Y, prescindiendo así de la típica batería de 12 voltios. Por el resto, podemos esperar una configuración y motorizaciones similares al compacto eléctrico.
