Se podría decir que en muchos casos, quien primero da el puñetazo sobre la mesa es quien se lleva el gato al agua. Justo lo que ha pasado con Tesla. Con una autonomía difícil de batir y una tecnología de conducción autónoma también a la vanguardia, unida a la falta de competencia, han sido motivos más que suficientes para establecer una hegemonía en el sector de los premium eléctricos.
Ahora bien, ante este panorama, son las grandes alemanas quienes se han puesto manos a la obra estos años para poder ofrecer una ofensiva de productos eléctricos muy interesante en los próximos años. Y ahí es donde esa posición privilegiada que ocupa Tesla en la actual podría tambalearse.
Según un estudio realizado por la consultora PA y del que se hace eco Bloomberg, Tesla continuará manteniendo el liderazgo en eléctricos hasta 2019, si bien, de acuerdo al estudio, en 2021 serán relevados por Daimler, BMW, Renault-Nissan, Volkswagen y Volvo. Porque aunque estos últimos puedan tener a ciertos niveles una tecnología que todavía no esté tan madura como la de Tesla en materia de eléctricos, no debemos olvidarnos que todos estos fabricantes tienen algo que el fabricante californiano no tiene: décadas de experiencia fabricando modelos de gran tirada, justamente lo que a Tesla se le está atragantando con el Model 3.
Y es precisamente este último modelo el que debe poner sobre la mesa una gran tirada que no sólo le permita a Tesla ganar dinero, sino también poder seguir manteniendo el tipo cuando los demás fabricantes se metan también a batallar en diversos segmentos con eléctricos de diversas configuraciones.
Porque cuando los demás fabricantes igualen la autonomía de Tesla o incluso la superen, y puedan comerle terreno también en tecnologías de conducción autónoma… ¿qué será entonces lo que le permitirá desmarcarse de su competencia?
