Esta conclusión sale de un estudio realizado en Reino Unido: en cada pulgada cuadrada (1 pulgada = 2,54 cm) de un aseo público se encuentran unas 80 bacterias. Es bastante sucio, pero lo preocupante es que en la misma superficie del interior de un coche, especialmente el volante, palanca de cambios y asientos traseros, se encuentran hasta 700 bacterias. Ahora que seguramente te has puesto a pensar lo sucio que tienes el coche, también te diré que según el estudio 42% de los conductores comen mientras conducen, con la consiguiente ingesta de bacterias.
El coche es un lugar perfecto para la acumulación de bacterias y si se come y se dejan restos de comida dentro (he visto coches llenos de migas y restos de comida), el peligro de acumulación es todavía mayor. Lo inteligente es limpiar el coche a consciencia periódicamente. Lo malo, es que el estudio vuelve a decepcionarnos en este sentido, y es que solamente la tercera parte de los encuestados limpian el interior de su coche una vez al año. Más preocupante aún es que 10% de los encuestados NUNCA han limpiado el interior de polvo y tampoco han usado la aspiradora.
En fin, es curioso ver personas que tratan de mantener la casa limpia, pero después conducen un coche que da vergüenza ajena verlo. Las bacterias del coche no deberían causar problemas de salud serios, aunque sí es posible que ocurra.
Espero que este estudio ayude a concienciar a los conductores mantener más limpio el coche y evitar mala imagen y riesgos innecesarios de infecciones.
Vía: carscoop