Si hay un vehículo que puede dar mucho juego y momentos de diversión como ningún otro ese es, sin lugar a dudas, el BMW M135i (parte 1, parte 2), un vehículo que estrictamente de serie monta un motor de seis cilindros en línea sobrealimentado de 3.0 litros capaz de desarrollar la nada despreciable cifra de 320 caballos y 450 Nm de par máximo.
Como puedes ver, con semejantes prestaciones, estamos ante uno de los compactos más rápidos y divertidos del mercado, un vehículo muy exclusivo que gracias al trabajo de Manhart Racing eleva su potencia hasta los 405 caballos y 560 Nm de par máximo gracias a novedades como una nueva ECU o un sistema de escape fabricado en titanio mucho menos restrictivo al instalado de serie.
400 caballos para tu BMW M135i gracias a Manhart Racing
Ahora bien, como ya hemos hablado en más de una ocasión, no solo hay que aumentar la potencia del motor, sino que este aumento hay que compensarlo con mejoras a nivel estructural. En este caso hablamos de un equipo de frenos más potente con pinzas de ocho pistones y discos de 380 mm en el eje delantero. A esto hemos de sumar llanas de aleación de 19 pulgadas calzadas con neumáticos de alto rendimiento, suspensión KW Clubsport así como un diferencial de bloque Quaife.
En el interior lo diseñadores de Manhart se han conformado con un tapizado en cuero y alcántara de color negro con costuras de color amarillo, asientos deportivos de BMW o inserciones en fibra de carbono.
BMW M135i por Manhart Racing
Vía: wcf