Aunque hasta la fecha, Mansory siempre había apostado por firmas mucho más lujosas, parece que quieren dar un cambio en sus políticas y enfocarse también en otras marcas que están teniendo un éxito apabullante y pueden atraer a una cartera de clientes importantes. Estamos hablando de Tesla Motors.
Y lo han hecho con un modelo que aún no ha despertado mucho interés entre los preparadores (en parte, debido a que es el propio fabricante quien pretende disuadir a sus clientes de la instalación de modificaciones no oficiales dado que pueden mermar su autonomía): el Model S.
Mansory sin embargo asegura que la instalación de sus piezas debería mejorar la autonomía y su comportamiento dinámico. ¿Y en qué consisten dichas mejoras? En un paragolpes delantero realizado en fibra de carbono, así como los faldones laterales, difusor posterior y el alerón sobre el portón, también realizados con el mismo material. Las llantas son ahora mucho más vistosas: se trata de unas M10 de 22 pulgadas con neumáticos 295/25.
Su habitáculo no queda exento de modificaciones: pedalier en aluminio, volante deportivo, paneles de puerta con los umbrales iluminados además de unas franjas decorativas a lo largo y ancho del habitáculo: tapicería, salpicadero y volante (de dudoso gusto, pero pretenden realzar su filosofía «eco»).
