No es la primera vez que Mansory ensalza las virtudes del Lamborghini Huracán. A principios de año, ya lo hizo y nos desveló una preparación de 850 CV junto con algunos cambios estéticos.
Pero… con la barrera psicológica de los 1000 CV tan al acecho con esa potencia y el aliciente que puede suponer para muchos potenciales clientes de la marca ansiosos de seguir gastando su dinero, han optado por romper dicha barrera… y con creces.
El V10 de 5.2 litros de origen atmosférico recibe un kit de sobrealimentación formado por dos turbocompresores que aumentan su potencia hasta los 1.250 CV y su par hasta los 1000 Nm (limitados electrónicamente).
Si ya de serie resulta una máquina muy seria, te puedes imaginar con estas cifras sobre la mesa. Nosotros te las develamos: 0-100 km/h en 2,7 segundos y una velocidad máxima de 340 km/h.
Para contrarestar el peso que puedan sumar estos turbocompresores, se le ha dotado de un kit de carrocería realizado en fibra de carbono que ensanchan aún más si cabe el conjunto: 30 mm en el eje delantero y 40 mm en el eje trasero. También se le dota de unas llantas de aleación de 20 pulgadas con neumáticos 245/30 en el eje delantero y 21 pulgadas y 325/25 de medida de neumáticos. En ambos casos, eso sí, las llantas van forjadas.
Su interior también recibe un aplique más diferenciador, siendo mucho más generosa la aparición de cuero y alcántara, combinando con el pedalier en aluminio, alfombrillas específicas, algunas inserciones en fibra de carbono, y para culminar, se ha recolocado la ubicación del interruptor de encendido del coche.