Recientemente MINI introdujo el renovado Clubman y ahora vuelve a la carga con el lanzamiento de los nuevos MINI John Cooper Works Countryman y John Cooper Works Clubman, que se posicionan con las versiones más potentes y que además, respecto al modelo anterior, recibe un importante incremento de potencia.
Tal es el incremento, que son los vehículos de calle más potentes fabricados hasta la fecha por la marca británica. Para ello, se nutre de 75 CV y 100 Nm adicionales respecto a sus predecesores, todo ello sobre la base del bloque 2 litros gasolina sobrealimentado, dando una potencia resultante de 306 CV y 450 Nm de par. Para lograr este aumento de potencia tan importante, se han realizado numerosas modificaciones de gran calado sobre el motor, como la relación de compresión que se reduce desde los 10,2 hasta los 9,5 para permitir una mayor presión de soplado del turbo de mayor tamaño. Los inyectores de combustible permiten aumentar el caudal con una presión de inyección de hasta 350 bar.
El sistema de refrigeración ha sido rediseñado en su totalidad, incorpora además un escape específico así como un filtro de partículas para poder cumplir con la normativa Euro 6d-TEMP. También todos los internals son de nueva factura, encontrando un cigüeñal reforzado, nuevos cojinetes de bancada, pistones y bielas, así como un nuevo amortiguador de vibraciones con refrigeración optimizada.
La caja de cambios, en ambos casos, es nueva y sólo está disponible con ella: una Steptronic de 8 velocidades automática con bloqueo mecánico del diferencial delantero de hasta el 39% y tracción a las cuatro ruedas ALL4, que permite una correcta transferencia de su potencia al suelo, con un 0-100 km/h que en el caso del Clubman JCW es de 4,9 segundos y en el Countryman es de 5,1 segundos, siendo en ambos casos la velocidad máxima limitada a 250 km/h.
El chasis ha recibido numerosos refuerzos para soportar este importante aumento de potencia, mientras que el equipo de frenos se ha adecuado al nuevo paradigma, con un equipo de cuatro pistones con discos de 360 mm en el eje delantero y 330 mm en el trasero.
Finalmente, en el plano estético también introducen numerosas diferencias respecto al resto de la gama, como unas tomas de aire delanteras mucho más generosas, llantas de 18 pulgadas (19 en opción), parrilla delantera específica, salidas de escape de 95 mm de diámetro así como la pintura de contraste opcional en rojo para techo y carcasas de los retrovisores. Su habitáculo cuenta con unos asientos deportivos con reposacabezas integrados, volante deportivo multifunción, palanca de cambio específica y recubrimiento del techo antracita.