Continuando con las pruebas de invierno, Mercedes ha llevado a su próximo coupé medio, el CLK, a Suecia. Y más que a esquiar, a hacer kilómetros. Con toneladas de camuflaje encima resulta prácticamente imposible pensar en un frontal limpio y sencillo, e ídem de la parte trasera. Pero según parece, es más sencillo de lo que pueda parecer.
Fijémonos: el frontal apunta a que será muy parecido al del CLC, y no tiene indicios de que al menos los faros vayan a ser diferentes. La línea lateral estará claramente influenciada por las líneas de coupé maestras del CL; y los faros de la parte trasera serán tan extravagantes que inundarán parte de las aletas traseras.
Hay detalles muy interesantes que quedan en secreto, como la hipotética caída del maletero similar a la del CLS o el por qué de unos faros traseros tan largos. Lo cierto es que el CLK va a demostrar qué es exactamente un coupé, y aunque finalmente no sea tan agresivo como el A5 o el Serie 3, mantendrá unas líneas que seguramente dejen al CLK como el más elegante de todos.
Vía: WCF
