No es ningún secreto que de una manera u otra, el mercado de los SUVs de alta categoría y un nivel muy premium está comenzando a resurgir y si bien el down-sizing está siendo toda una tendencia en algunos de estos portentosos todoterrenos urbanos tales como el Audi Q7, parece que hay sitio para todos porque con estos modelos con unas dimensiones cada vez más compactas, está comenzando a haber un hueco muy interesante donde hay sitio para, entre otros, el ya confirmado BMW X7.
Estos SUVs con espacio mayoritariamente para 7 adultos abre la puerta a nichos de mercado más concretos y donde incluso marcas de muy alta categoría como Bentley o Rolls-Royce pueden hincar el diente. A finales del ya pasado año 2014 pudimos confirmar que Bentley lanzará durante este año el Bentayga, el SUV de la firma británica y que tendrá una respuesta tanto por parte de BMW con el X7, como por Rolls-Royce con el SUV que están desarrollando y del que hoy, podemos dar algunos detalles más sobre el desarrollo del británico.
Será tan largo como el Phantom
El propio CEO de Rolls-Royce, Torsten Müller-?tvös, ha confirmado que el SUV inglés tomará como base el chasis y la plataforma del BMW X7 pero que será muy diferente en todos los aspectos, no quieren que este modelo sea simplemente un X7 con un profundo lavado de cara. De momento, Torsten ha confirmado que en longitud será prácticamente tan largo como el Phantom, el cual supera los más de 5.60 metros de longitud. Con un precio base superior al cuarto de millón de euros, las dimensiones serán incluso superiores a las del X7. Con esto, el motor base será un V12 de 6.75 litros derivado del que porta el Phantom y la potencia base superará los 480 caballos.
Será interesante conocer si habrá sitio para un motor de acceso como por ejemplo el V8 Twin Turbo de BMW. No suena factible pensando en que Rolls-Royce quiere diferenciar lo máximo posible el SUV británico del BMW X7, el cual se centrará en un mercado mucho más generalista (dentro de lo que supone un Rolls-Royce), y que por supuesto tendrá un objetivo final en el mercado muy diferente. Ambos modelos coexistirán en nichos diferentes y para un público también muy diferente.
Debutará en 2017, poco después del BMW X7
Las informaciones que hemos recabado hasta la fecha ponen sobre la mesa un debut en este mismo año del BMW X7. Un guiño importante teniendo en cuenta que esto implica que el desarrollo ya está muy avanzado, algo lógico si recordamos que el X7 portará el chasis del nuevo Serie 7 que también debutará este año y que lleva prácticamente cinco años en desarrollo. En el caso del SUV de Rolls-Royce, lo veremos debutar a principios del 2017 y en ese mismo año ya estará disponible en los concesionarios de la marca. Una vez debute el X7 iremos despejando las dudas e incógnitas que se ciernen sobre el inglés, incluyendo el uso e instalación de algún tipo de sistema híbrido como recurso para reducir el consumo de carburante.
Vía: Autocar