La despedida de los motores V8 en Maserati es ya una realidad: un cliente de los Estados Unidos (empresario del sector biomédico) ha recibido su Quattroporte Gran Finale, que es el último Maserati dotado de un motor de ocho cilindros en V. Además, no contento con eso, también compró un MC20 que le ha sido también entregado.
Por eso fuese poco, la entrega se llevó a cabo el 31 de julio en el sur de los Alpes, concretamente en Lake Maggiore, por lo que una vez entregados, ahora el cliente en cuestión se los tendrá que llevar al otro lado del charco con él.
Volviendo a la unidad protagonista, el último ejemplar con motor V8 de la berlina italiana está acabada en color ‘Blue Nobile’ y cuenta con detalles en fibra de carbono y pinzas de freno terminadas en aluminio cepillado.
Su interior nos recibe con pilares A tapizados en piel de color negro, un emblema ‘Grand Finale’ en el túnel central y entrada de las puertas, costuras negras y revestimiento de cuero en el maletero, así como paneles de puerta en color beige.
El motor es el V8 con doble turbocompresor y 3.8 litros de origen Ferrari con 580 CV de potencia y 730 Nm de par.
Por el momento no habrá un sucesor inmediato puesto que el desarrollo de la versión eléctrica se ha retrasado, así que será una unidad todavía más exclusiva y especial si cabe.