No sólo los vehículos de gran tirada serán los que se arrodillen ante la electrificación: también lo harán deportivos de seis, ocho e incluso doce cilindros como los que tiene Mercedes-AMG en su gama. Nadie escapará a la electrificación durante las próximas décadas y por ello, la firma Affalterbach quiere ir sentando las bases para que cuando entre el resto de fabricantes de deportivos comiencen a popularizarse los vehículos eléctricos, llevarles la ventaja que les otorga el haberse adelantado.
Es por ello que actualmente se encuentran investigando cómo electrificar su gama de manera paulatina sin perder por ello las señas de identidad que componen su ADN. A día de hoy, hablar de un AMG actual implica de manera inexorable hablar también sobre el bramido que emanan sus escapes (especialmente en sus icónicos V8), algo que obviamente no estará presente en la horda de vehículos eléctricos y que tendrán que estudiar cómo suplir esa característica cada vez más representativa.
Drummond Jacoy, director de desarrollo de vehículos de la compañía, ha comentado en declaraciones a Autocar que el SLS eléctrico les ha servido como una buena base para el desarrollo de híbridos a posteriori, y que es sólo un anticipo de lo que está por llegar. Mercedes-AMG se involucra en el proceso de desarrollo de muchos modelos de Mercedes de cara a asegurarse que a posteriori podrán ser transformados en modelos de altas prestaciones, y ahora también está habiendo ese acercamiento en el desarrollo de modelos eléctricos que Mercedes está llevando a cabo.