Mercedes ha completado la gama de la quinta generación del Clase E con la introducción del E Cabrio, y que tal y como estaba previsto, será uno de los protagonistas en el stand de Mercedes en el Salón de Ginebra, aunque no lo veremos llegar a los concesionarios como pronto hasta finales del presente año o comienzos del que viene.
El Clase E Cabrio reduce la altura de su carrocería en 15mm frente a la berlina de cara a focalizarse algo más en la deportividad. Estéticamente, no presenta prácticamente cambios frente a un Clase E Coupé 2017 más allá de su techo, del que te vamos a hablar a continuación algo más en detalle.
Realizado en lona acústica multicapa (como la empleada en el Clase S Cabrio) y con un accionamiento totalmente eléctrico, requiere únicamente de tan sólo 20 segundos para accionarse y pudiéndose realizar a una velocidad de hasta 50 km/h. De cara a lograr un mayor confort en su interior, se ofrece el deflector eléctrico AIRCAP que permite reducir considerablemente las turbulencias. Tampoco falta el Airscarf que oferta Mercedes en varios modelos de su gama desde hace algunos años: consiste en una calefacción a la altura del cuello en los asientos delanteros. El climatizador también cuenta con cierta lógica, ya que adapta su temperatura de manera automática en función de si vamos capotados o descapotados.
El cubicaje del maletero oscila en función de la posición del techo, siendo de 310 litros con la capota recogida y 385 con la capota puesta, contando además con asientos abatibles 50:50 que nos pueden sacar de un apuro a la hora de cargar objetos voluminosos.
Su habitáculo no introduce novedades más allá de las vistas en otras variantes del modelo, como su pantalla de 12,3 pulgadas dedicada al sistema de infoentretenimiento así como otra opcional del mismo tamaño que permite digitalizar la instrumentación. En caso de contar con ambas, contamos con una visión panorámica en su salpicadero muy similar a la que hallamos en el Clase S.
Mercedes Clase E Cabrio 2017
