Lo admito. El Mercedes CLK de calle es uno de mis coches favoritos, ese diseño tan elegante pero a la vez discreto, su frontal que a pesar de contar con una estética algo desgastada hasta hace no mucho en la gama Mercedes-Benz sigue conservando su belleza, y finalmente, sus faros traseros, que inspiran una fusión entre deportividad, buen gusto y elegancia, y que francamente veo muy difícil que Mercedes sea capaz de superar esa obra de arte como es el culo del CLK actual en el CLK de nueva generación.
Naturalmente, si tanta simpatía me causa el CLK de calle, es evidente, que el de competición multiplica todos mis sentimientos hacia él por una cifra notablemente alta. Y puedo decir lo mismo con este peculiar CLK DTM AMG naranja, que únicamente no se limita a un cambio de color exterior, también en su interior podemos encontrar muchos elementos en el mencionado color.
Y a vosotros, ¿qué os parece?
Vía: autoblog.nl
