Mercedes pondrá a la venta a partir de Mayo el lavado de cara del Mercedes CLS, que principalmente destaca por algunos cambios discretos en su diseño y la incorporación de una versión nueva -CLS 280-. El Mercedes CLS es una berlina con cuatro plazas y cuatro puertas con un perfil que recuerda a las líneas típicas de un coupé y con un diseño deportivo, pero sin perder un ápice de elegancia.
Estéticamente, tal y como decía en el párrafo anterior, hay cambios, discretos, pero los hay. En su exterior, podemos destacar su nueva parrilla, que ahora cuenta con dos barras en lugar de cuatro y que le permite una entrada de aire mejor respecto a la parrilla a la que sustituye. Además, sus faros traseros han sido actualizados, y ahora cuentan con diodos LED y están ligeramente rediseñados. Finalmente, nuevos paragolpes, nuevas salidas de escape (antes tenían forma ovalada, ahora trapezoidal), y unos retrovisores un 32% más grandes, que además incorporan intermitentes con forma de flecha y LED.
En su interior, los cambios son también discretos, destacando el nuevo volante multifunción de tres radios rediseñado de forma que las zonas comunes de agarre por parte del conductor están realizadas con cuero perforado para poder así ofrecer un mejor agarre. El CLS presenta la nueva generación NTG 2.5 de telemática, cuyos componentes de alto rendimiento combinan un manejo sencillo y un menú lógico de navegación con un impecable sistema de entretenimiento. Las características incluyen un control de volumen sensible a la velocidad, un teclado para introducir números de teléfono y frecuencias de radio, un reproductor de CD y DVD compatible con MP3, así como una interfaz Bluetooth que puede establecer una conexión inalámbrica entre un teléfono móvil y el sistema de manos libres del coche.
Pasando ahora al apartado mecánico, empecemos por el motor con menos potencia, el CLS 280, un nuevo motor que pasa a ser ahora el motor de acceso a la gama. V6 con una cilindrada de 2996, 231 CV de potencia y un par máximo de 300 Nm. Con este motor, el CLS es capaz de realizar el 0-100 Km/h en 7.7 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 245 Km/h, todo ello con un consumo homologado de 9.8-10 litros a los 100 kilómetros.
El único diésel –CLS 320 CDI-, por potencia, le corresponde esta colocación entre párrafos. Motor V6 de 224 CV con un par máximo de 540 Nm y un consumo combinado de 7.6-8.1 litros a los 100 Km.
El siguiente motor es el CLS 350 CGI, se trata de un V6 de 292 CV con inyección directa piezoeléctrica, con una potencia de 292 CV y con un consumo combinado de 9.1-9.3 litros.
El último escalón antes del AMG en motores gasolina del CLS, viene de la mano del CLS 500, que es un V8 con una cilindrada de 5.5 litros y una potencia de 388 CV.
Destacar también, que independientemente del motor que se escoja a la hora de su adquisición, todos incluyen de serie la caja de cambios automática de 7 velocidades «7G-Tronic», mientras que la versión AMG lleva el «AMG Speedshift 7G-Tronic».
Y finalmente, el rey de reyes, as de ases: CLS 63 AMG. Lleva un V8 de 6.3 litros con una potencia de 514 CV y un par máximo de 630 Nm asociado a un cambio 7G Speedshift 7G-Tronic. Como es natural, las cifras son de escándalo dado el motor que lo «empuja»: 0-100 Km/h en 4.5 segundos y una velocidad máxima limitada electrónicamente de 250 Km/h.
Opcionalmente, en caso de elegir la versión AMG, se le puede añadir un paquete opcional denominado AMG Performance Studio, que añade un volante de dimensiones más reducidas y llantas gris titanio de 19 pulgadas de aluminio forjado.
A continuación, los precios para Alemania:
Mercedes CLS 280: 55,692.00 euros
Mercedes CLS 320 CDI: 59,321.50 euros
Mercedes CLS 350 CGI: 61,404.00 euros
Mercedes CLS 500: 75,053.30 euros
Mercedes CLS 63 AMG: 106,624.00 euros
Vía: Mercedes
El CLS63 AMG se me antoja barato para lo que es.