El nuevo Mercedes Clase A debutará como «segunda» generación trayendo una enorme cantidad de novedades y cambios tras de sí. Mercedes-Benz lleva varios años haciendo muy bien los deberes para incorporar en el Clase A todo lo necesario para dar un gran salto adelante, y tener la continuidad más que garantizada. Ahora, con el Clase A de segunda generación en el horizonte, podemos ir viendo con algo más de detalle todo lo que está por venir.
Lo que más atención nos llama es, además de la incorporación de una renovada plataforma más ligera y eficaz, una expansión de la gama AMG Performance en la línea del Clase A tanto en el hatchback, como en los próximos GLA y CLA. Los tres recibirán al menos una versión extra AMG al completo, y esto dará alas a los futuros modelos «45». Como ya habrás deducido, la idea que tienen en la marca de la estrella pasa por una nueva versión intermedia, bautizada de momento como AMG A 32 (o A 40).
¿Qué esperamos de estas versiones? Mercedes y AMG comercializarán el A 32 para competir principalmente con el Audi S3. Con el paso de los años, el actual Clase A AMG ha recibido tales actualizaciones de potencia que en la próxima generación su estado natural será superior a los 400 caballos, y la parte negativa es, obviamente, la existencia de un «hueco» que deben suplir para evitar perder a todos aquellos clientes que quieren un compacto (o más bien un crossover o un sedán de tamaño medio, hablando del GLA o CLA, respectivamente) que sea potente y contundente, pero sin llegar a cifras astronómicas. En esta guisa, sí podemos dar por hecho que Mercedes y AMG utilizarán un motor 2.0 litros turbo de 4 cilindros. Algo que, de una manera u otra, no podemos confirmar con el futuro A 45.
