Mercedes finalmente ha presentado el GLA, un SUV compacto que mide 4,4 metros de longitud, 1,8 de ancho y 1,5 de alto, además, emplea la plataforma del Clase A y que pretende rivalizar con modelos como el BMW X1 y Audi Q3. Por el momento, la firma germana ha publicado un buen puñado de fotos e información, pero hasta el Salón de Frankfurt que se celebra el mes que viene no podremos verlo en vivo.
Estéticamente, se opta por un diseño derivado del actual Clase A, un paso lógico, si tenemos en cuenta que este último está siendo todo un éxito de ventas y que cuenta con uno de los diseños más atractivos dentro de su segmento. Se opta por una carrocería de líneas más definidas, con múltiples protecciones plásticas en los bajos para facilitar la circulación por terrenos en mal estado, protegiendo la chapa.
Estética que resulta familiar, pero atractiva
En la parte frontal, se apuesta por dos pequeñas tomas de aire a los lados, y una gran toma frontal en la parte inferior, seguida de la ya característica parrilla de Mercedes, que preside la estrella de tres puntas de la marca. En su zaga, se opta por una salida doble de escape, enmarcada dentro de un difusor de plástico de color negro. Su diseño de líneas aerodinámicas, junto con una altura libre sobre el suelo contenida, así como otras soluciones técnicas como el carenado de los bajos y la parrilla delantera activa, le permiten lograr un coeficiente aerodinámico de 0,29 Cx, una cifra realmente buena para un vehículo de estas características.
Habitáculo en línea con la gama
Si su estética exterior nos recordaba mucho al Clase A, el habitáculo no es menos. Bajo el mismo envoltorio, con el característico como el volante de tres radios, las cinco salidas de aire redondas, el GLA nos ofrece una estética atractiva, gracias a los asientos delanteros de corte deportivo y mención aparte requiere su modularidad, ya que por ejemplo, además de reclinarse los respaldos de los asientos posteriores, también se puede variar la inclinación de los mismos, logrando, según Mercedes, hasta 60 litros de capacidad adicional.
La capacidad de su maletero, se sitúa en los 421 litros, ampliables a 836 litros si abatimos el respaldo de los asientos traseros. Además, la reducida altura de la carrocería y de la boca de carga, junto con las grandes dimensiones del portón trasero, permite una fácil carga de objetos.
Dotación de seguridad abundante
Mercedes ha puesto especial atención en la dotación de seguridad del modelo. Por ello, podrá equipar, según versiones, elementos como un sistema de prevención de colisiones que funciona en velocidades de hasta 200 Km/h, cuando detecta el radar incorporado que nos acercamos peligrosamente al vehículo precedente. Así mismo, otro sistema digno de mención será el detector de cambio involuntario de carril, indicador de ángulo muerto (ambos englobados dentro de un mismo paquete denominado ‘Attention Assist’, entre otros elementos.
Gama de motores: cubriendo todas las necesidades
Aunque la gama inicial de propulsores del GLA no es especialmente amplia, si la comparamos con sus rivales más directos, las cuatro opciones que encontramos son suficientes para satisfacer la mayoría de necesidades de los clientes. Concretamente, serán los GLA 200 (un 1.6 de 156 CV y un par de 250 Nm) y GLA 250 (2.0 de 211 CV y 350 Nm) en gasolina, mientras que en diésel encontramos los GLA 200 CDI (136 CV, con tan sólo un consumo medio homologado de 4,3l/100 km y unas emisiones de 114 g/km) y GLA 220 CDI (170 CV).
Todos ellos irán acoplados al sistema de arranque y parada automático Stop&Start y habrá variantes 4×2 (delantera) y 4×4, en función de las necesidades y el uso que se le vaya a dar al vehículo. Eso sí, si nuestra unidad la equipamos con el sistema de tracción integral, irá exclusivamente asociado al cambio de doble embrague 7G-Tronic, además, también le acompañará el sistema DSR (control de descenso) para usar especialmente fuera del asfalto, así como la posibilidad de modificar la respuesta del acelerador y la caja de cambios.
Mercedes GLA
