El Mercedes Clase E de nueva generación ya está entre nosotros, posicionado como la marca de la estrella como la berlina del segmento E más lujosa, premium y de mayores capacidades dinámicas que jamás han comercializado. La vida útil aún está comenzando, y es muy posible que nos quede prácticamente una década por delante al completo para ver cómo evolucionará la que podría ser la generación más larga de todas las que han culminado en el Clase E que hoy tenemos ante nosotros.
Mirando hacia adelante, este nuevo Clase E será el que tome por testigo dos grandes novedades a destacar por todo lo alto. La primera es que a diferencia de la generación anterior -aún actual, en parte-, Mercedes-AMG sí comercializará una versión de altas prestaciones del Clase E Coupé, es decir, un «full AMG» que competirá frente a frente con el BMW M6 Coupé, y que compartirá mecánica y chasis con su homónimo de cuatro puertas, el próximo Mercedes-AMG E 63, que es el protagonista -más bien será- de la segunda novedad. Porque por primera vez, el Clase E superará de fábrica los 600 caballos. ¿Qué más podríamos pedir?
La potencia llegará del V8 Twin Turbo de 4.0 litros
Mercedes-Benz y AMG Performance irán a por todas y es por esto que marcas como BMW están empujando a fondo con sus respectivas alternativas. Que el BMW M5 vaya a ganar protagonismo con la tracción total xDrive no es seña sino que la marca de la estrella los obligará, aportando un motor V8 Twin Turbo de 4.0 litros que catapultará la berlina de 0 a 100 kilómetros por hora en 3.5 segundos, con una potencia neta de 612 caballos, equiparándose a grandes rasgos con el V12 Bi-turbo de 6.0 litros de la marca.
