No, el titular no contiene ningún error. El roadster de Mercedes se sigue denominado por el momento SLK, aunque próximamente cambiará su denominación a SLC coinciendo con la actualización del modelo. Mientras tanto, desde la casa matriz han optado por hacer una pequeña reestructuración en la gama de motores y añadir más equipamiento en materia de seguridad.
Cambios mecánicos
El primero de ellos, el SLK 200, continúa con 184 CV de potencia, pero han optimizado su funcionamiento para sumarle 30 Nm de par adicionales. Por su parte, el SLK 250 de 204 CV desaparece en favor del SLK 300, pasando ahora a contar con 245 CV de potencia y 370 Nm de par motor.
Por su parte, el propulsor diésel SLK 250d de 204 CV continúa en la gama con la misma potencia, pero su consumo se ha visto reducido en medio litro, homologando ahora una cifra de 4,4l/100 km.
También parte como novedad la caja automática 9G-Tronic, disponible en los SLK 300 y 250d como parte de la dotación de serie, mientras que en el SLK 200 también se podrá equipar de forma opcional.
Mayor equipamiento de serie
Las luces diurnas LED vienen ahora en la dotación de serie. Además, el Comand Online se ha actualizado de cara a aumentar su compatibilidad con los terminales de nueva generación. No faltan sistemas de seguridad como asistente de ángulo muerto, detector de fatiga/cansancio, Prevention Collision Assist Plus (frenada automática en caso de peligro inminente), aviso de cambio involuntario de carril, entre otros.
El broche final lo pone la incorporación de dos nuevos colores a la carta de colores de la carrocería.