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Recientemente tuvimos ocasión de acudir a la cita anual de Mercedes denominada Mercedes-Benz Test Day donde muestran a los medios las últimas novedades de sus modelos. Y generalmente, todos los años siempre suele ir acompañado de varios Mercedes-AMG, este año no ha sido menos, donde el protagonismo de los mismos ha cobrado todavía mayor intensidad respecto a pasadas ediciones.
En concreto, pudimos probar unidades del Clase E Cabrio, Clase X, AMG GT Roadster, Clase E All-Terrain, Clase E Coupé, Clase S y GLA. Dependiendo del modelo, en algunos casos se correpsondía a un lavado de cara llevado a cabo recientemente, mientras que en otros, de un modelo de nuevo lanzamiento. El tour ha tenido el siguiente recorrido: Lalín (Galicia), Suances (Cantabria), Valls (Tarragona) y por último Pinedo (Valencia),
La firma alemana ha logrado con la ofensiva de su gama un récord sin precedentes, llegando incluso a situarse durante 2017 como la marca premium más vendida con 2,28 millones de unidades por delante de BMW y Audi, un éxito que también se transfiere a nuestro país, con un crecimiento superior al 10% frente al periodo de 2016.
El éxito se traslada también a las variantes más deportivas de la marca que firma AMG, donde el 50 aniversario de AMG se ha celebrado con una vigorosidad sin precedentes: durante el primer semestre de 2017, lograron las 322 matriculaciones en España, es decir, un crecimiento del 75% frente a las cifras del primer semestre del 2016, algo que ha permitido la nueva saga de modelos Mercedes-AMG 43 que ha servido como gama de acceso, además de los nuevos lanzamientos con el V8 biturbo de hasta 612 CV que enocntramos en el E 63 4MATIC+ S y el S 63 4MATIC+.
Mercedes Clase X: El primer Pick-up de Mercedes
Esta apuesta de un segmento en auge gracias a la inercia que han traído los SUV -y a que ahora pueden ser matriculados como turismos, superando así los 90 km/h de velocidad máxima- pero donde aquí el cliente busca algo con mayores posibilidades fuera del asfalto. Deriva del Navara, del que comparte motores, cajas de cambio y plataforma. Donde Mercedes ha puesto el elemento diferenciador es en la dirección, suspensiones, posibilidades de equipamiento y claro está, su diseño.
A la hora de conducirlo, una de las cosas que más llama la atención es el aplomo que muestra en carretera frente a algunas de las alternativas pick-up que encontramos en el mercado, donde un marcado carácter campero lastra claramente su comportamiento en el asfalto. En este caso, parecen haber logrado un compromiso loable entre ambos mundos, dejándonos muy buen gusto el tacto de la dirección y donde se ha dejado patente claramente que lo que Mercedes ha buscado es ante todo un vehículo polivalente, sin renunciar por ello a sus prestaciones fuera del asfalto, que por lo poco que hemos podido ponerlo a prueba, nos ha parecido muy capaz.
Mercedes AMG GT Roadster
Un modelo que aunque no suceda de manera directa al SLS AMG, sí que podemos considerarlo un modelo que ha logrado llenar el hueco en la gama dejado por él. Un deportivo descapotable biplaza dotado del motor V8 biturbo que está disponible en diferentes configuraciones: el GT de 476 CV, y el GT C de 557 CV.
Nuestra unidad en concreto, era el GT de 476 CV entregados a 6.000 rpm, con un par máximo de 630 Nm disponible desde las 1.750 hasta las 5.000 vueltas. Sus cifras prestacionales son extraordinarias: 0-100 km/h en 4,0 seugndos, una velocidad máxima de 302 km/h y un consumo medio homologado 9,4l/100 km, cifras que en lo prestacional mejoran y en lo referente a su consumo empeoran en el caso de la variante GT C Roadster.
Cuando nos ponemos al volante, lo primero que hacemos es accionar aquellos mecanismos que se ponen a nuestra disposición en este modelo concreto y que son precisamente la piedra angular del mismo. El primero de ellos, es el techo de lona: en tan sólo 11 segundos la tenemos retirada, ofreciéndonos la opción de hacerlo a velocidades de hasta 60 km/h. Ahora nos toca dar el siguiente paso: seleccionar el modo de conducción. De entre los disponibles, C (Comfort), S (Sport) y S+ (Sport Plus), nosotros evidentemente nos decantamos por el S+ para sacarle el mayor partido.
Gracias a que cuenta con un escape con mariposas, el sonido varía y despertamos a una auténtica bestia. Rápidamente, nos percatamos además de la diversión que ofrece por su configuración de propulsión trasera, donde encontramos una zaga mucho más juguetona que en sus principales rivales de tracción total. La dirección la encontramos muy comunicativa y en general, el vehículo responde con una agilidad increíble, ofreciendo grandes dosis de diversión al conductor.
Mercedes-AMG S63 4Matic+
Uno de los máximos exponentes del lujo, tecnología y representación que podemos encontrar en la industria automovilística actualmente. Recientemente puesto al día, esta berlina de altos vuelos nos ofrece un V8 biturbo de 4 litros y 612 CV y una estética que en absoluto pasa desapercibida. Pero lo mejor está por llegar: es entonces cuando nos sentamos en su habitáculo y los comodísimos butacones con numerosas regulaciones y climatizados rematados en cuero de primer nivel nos dan la bienvenida en él. Aunque la comodidad y amplitud que nos otorgan las plazas traseras nos hace difícil la elección de la posición que vamos a tomar en él, por otra parte…
Comenzamos a rodar con él y decidimos que ya va siendo hora de despertar a ese V8: activamos el modo Sport+ de conducción y el sonido cambia por completo, ahora, cada vez que levantamos el pedal del acelerador, nos acompaña una sinfonía de petardazos en el escape. La satisfacción que otorga conducir en este modo es elevada, aunque evidentemente no está concebido para el día a día ni para viajes de larga distancia.
Su capacidad de aceleración, aún con las más de dos toneladas de peso del conjunto, es también espectacular, gracias también a los 900 Nm de par que se nos ofrecen a partir de las 2.750 rpm. El empuje es constante en todo el rango de revoluciones, y su caja de cambios automática de siete marchas responde con rapidez y decisión a la hora de actuar. La tracción 4MATIC elimina las insinuaciones en la zaga, por lo que va sobre raíles.