Aunque el actual MINI Clubman lleva ya desde mediados de 2015 entre nosotros, siendo un modelo especialmente indicado para aquellos que quieren la singularidad de un MINI pero contando a su vez con mayores dimensiones y la versatilidad que le confiere la apertura del maletero, ahora suma una variante de tracción total a su oferta denominada ‘ALL4’.
No es la primera vez que un modelo de MINI cuenta con este sistema de tracción total, pero el que estrena en esta ocasión destaca porque además de contar con una mayor eficiencia y menor peso, también cuenta con regulación electrohidráulica además de un acoplamiento angular en el diferencial delantero ‘Power-Take-Off‘ para transferir la fuerza al eje delantero, mientras que al trasero, lo hace a través de un árbol articulado de dos piezas conectado con un acoplamiento de discos ‘Hang-on’.
Frente a un modelo de similares características pero sin tracción total, el sistema de tracción total suma 90 kg adicionales, estando además disponible en los motores gasolina turbo de 2 litros y 192 CV Cooper S con el que homologa 6,3l/100 km y unas emisiones de CO2 de 146 g/km y el 2 Cooper SD de 190 CV con un consumo medio homologado de 4,8l/100 km y unas emisiones de 126 g/km. En el gasolina, el cambio automático Steptronic de 8 relaciones está en opción, mientras que en la variante diésel es de serie sin posibilidad a equipar cambio manual.
Frente a un Clubman 4×2, presenta algunas diferencias como las llantas de 17 pulgadas -hasta 19 en opción-, logotipo ALL4 en la parte inferior de las puertas, además de un nuevo colo de carrocería ‘Digital Blue’. Su equipamiento de serie cuenta con múltiples airbags, control dinámico de tracción DTC con bloqueo electrónico del diferencial, anclajes ISOFIX, además de la posibilidad de montar de forma opcional techo panorámico de cristal, sistema Head-up display faros LED, asientos delanteros regulables eléctricamente, entre otros elementos.