En los Emiratos Árabes podemos encontrar preparaciones bastante extremas sobre la base de muchos todoterrenos, pero en especial, uno de origen japonés como es el mítico Nissan Patrol en prácticamente todas sus generaciones. La generosa capacidad financiera con la que cuentan allí muchos, fruto de lo que se conoce como los petrodólares les permite transformar sus Patrol en máquinas muy serias capaces de derrotar a deportivos y superdeportivos de potencias muy superiores.
Si estás siguiendo The Grand Tour, aunque en su primera temporada ya te haya dejado gratos recuerdos en tu mente, estamos seguros de que uno de ellos, es el momento en el que Richard Hammond se enfrenta con un Porsche 918 Spyder a un Nissan Patrol, y este último, en una carrera de aceleración, consigue ganarle. Parece increíble que un todoterreno preparado logre batir a uno de los superdeportivos tecnológicamente más avanzados de todos los tiempos con 887 CV, pero sí, tal y como pudiste ver, así es.
Evidentemente, y tal y como te podrás imaginar, el Patrol no lleva a nivel mecánico ni un sólo tornillo de serie. Los chicos de 1320 Video se han desplazado hasta Dubai para poder conocer más en profundidad la preparación con la que cuenta esta unidad tan peculiar que le ha llevado a hacerse mundialmente conocida a raíz de su aparición fugaz en The Grand Tour.
¿Y qué lleva? Para empezar, todo el conjunto mecánico del GT-R, formado por el bloque VR38DETT al cual se le ha aumentado la cilindrada desde los 3.8 hasta los 4.1 litros, y al que además, en sus internals, se le han realizado numerosas modificaciones hasta lograr los 1.900 CV de potencia. También cuenta con la caja de cambios del GT-R pero debidamente reforzar para aguantar esta cifra tan generosa de potencia, acompañada también de una carrocería con numerosos refuerzos y una jaula antivuelco en su interior (y para su instalación, se han tenido que suprimir los asientos traseros), frenos de GT-R así como los ejes del mismo.
Su habitáculo, además, recibe un injerto para lograr traer algunos de los elementos más representativos del habitáculo de un GT-R, como puedan ser el cuadro de relojes, el volante o la consola central y su display que muestra toda la información relativa al motor.
