¿Previsible? Para algunos sí. Muchos pudimos ver como Volkswagen se anticipó con bastante antelación en el mercado norteamericano respecto a las medidas de compensación a adoptar con sus clientes con el caso «Dieselgate» para conseguir dos objetivos: continuar fidelizándolos con esa compensación a modo de disculpa, y por otra, intentar reducir los litigios legales.
Estas medidas comprendían de 1.000 dólares en tarjetas regalo (de los cuales, 500 van destinados a una tarjeta VISA y otros 500 para gastarlos en concesionarios de la firma), muchos pensaron que veríamos alguna proposición similar en el viejo continente, pero sentimos decirte que no será así, al menos, de momento. Todo ello pese a que en EEUU hay 482.000 afectados por el escándalo, mientras que en el viejo continente son 8,5 millones el número de afectados, aunque VW se escuda en el hecho de que allí se anunciaban como «Clean Diesel» cuando en la práctica no lo eran.
Pero por tópico que suene, en Europa la legislación es mucho más laxa que lo que pueda resultar en los Estados Unidos. Y esto le permite a los fabricantes en general (no únicamente de coches, sino de todo tipo de artículos) tener más margen de maniobra cuando suceden casos como el que nos ocupa.
De la mano de un portavoz de la compañía en una entrevista, hemos podido saber oficialmente que las compensaciones económicas sólo serán ofrecidas a propietarios de Estados Unidos y Canadá. Mientras que en el resto del mundo, únicamente se limitarán a realizar las reparaciones pertinentes para que sus vehículos cumplan con la legislación que corresponde en materia de emisiones.
Vía: Autonews
