De forma inesperada y sin previsiones anteriores para un debut tan cercano, los chicos de Woking tiran de la manta y presentan de forma oficial el nuevo McLaren Senna. Haciendo honor al legendario piloto de Förmula 1 Ayrton Senna -y con los beneficios destinados a la fundación que lleva su nombre-, el McLaren Senna es la máxima expresión de lo que actualmente es la marca inglesa. Parte del mismo chasis del P1, y como ya te contamos todos estos meses atrás, prescinde del set-up híbrido para posicionarse como un auténtico superdeportivo de competición apto para circular por carretera abierta.
A la vista, el McLaren Senna guarda ciertas similitudes con el P1, pero los cambios son drásticos e imponentes. El diseño es radical y la aerodinámica no guarda límites apreciables, se busca la mínima resistencia al aire y el máximo aprovechamiento de éste para aspectos como la refrigeración del sistema de frenado -frenos carbocerámicos-, entre otros. Bajo el panel trasero de fibra de carbono y metacrilato, McLaren instala el mismo V8 Twin Turbo de 4.0 litros presente en el 720S, pero con un pequeño secreto… y es que la potencia sube hasta nada más y nada menos que 789 caballos y 900 nm de par motor. Esta cifra se consigue únicamente con el propulsor, por lo que aunque se quede lejos de la cifra marcada por el P1 -986 cv-, el peso neto es infinitamente inferior, marcado en 1.198 kilos frente a los 1.547 kg del P1.
Con un debut previsto para el próximo Salón del Automóvil de Ginebra, el McLaren Senna arrancará las ventas a partir del próximo otoño, aunque aparentemente las 500 unidades que se fabricarán están ya vendidas en su totalidad, a un precio mínimo cercano al millón de euros. Este proyecto, como ya te contamos en MotorAdictos, es independiente del nuevo superdeportivo que McLaren está trabajando y que será el sucesor directo del P1 y el sucesor espiritual del legendario F1.
