A veces, los caros y exclusivos elementos de equipamiento de algunos modelos de coche suelen colocarse en el punto de mira de los ladrones por la fácil salida que tienen en el mercado negro o porque han sido solicitados por encargo. Y no precisamente para otros propietarios del mismo modelo de coche, sino, generalmente, por gente de modelos de la misma marca o marcas del grupo automovilístico a los que les sirven esas piezas en su coche y que obviamente no se pueden permitir comprarlas nuevas a la casa matriz por su coste desproporcionado o por el inexistente mercado de segunda mano de piezas al tratarse de ediciones de muy poca tirada.
Esto mismo está sucediendo a los Audi RS4 de la generación B7 producidos entre los años 2006 y 2008 (sólo se comercializaron 2000 unidades) en Reino Unido, donde ya se han registrado 30 casos hasta la fecha sólo en Londres. Pero no porque roben el coche entero para luego venderlo por piezas o entero en otro país. No. Aquí están optando por algo más curioso, peculiar, y poco menos que hecho por encargo: robar los asientos delanteros de tipo baquet.
Unos asientos muy especiales firmados por Recaro
¿Qué tienen de especial estos asientos? Pues que para empezar, están realizados por Recaro, cuentan con un diseño muy atractivo, están tapizados en cuero y la parte trasera está reforzada y es rígida. Pero lo que abre las puertas a su mercado es que son fácilmente instalables en modelos como el S3, A4 o S4, además de otros modelos del grupo como el Volkswagen Golf (aunque la decoración bordada de los mismos no acompañe). Y si los encuentras en el mercado de segunda mano -cosa que no es especialmente sencilla-, su precio no será inferior de las 2.000 libras.
La cuestión es que estos asientos pedidos a fábrica a nivel post-venta son espectacularmente caros. Concretamente, la firma alemana pide por ellos casi 23.000 euros, poco menos de la cotización actual del modelo en tablas para el seguro, algo que ocasiona que en algunos casos pueda considerarse siniestro. ¿A qué se debe ese precio tan elevado? Entre otras cosas, a que hay que pedirlos a fábrica completamente desensamblados y posteriormente en el concesionario ensamblarlos y montarlos en el coche, una operación que lleva en torno a 20 horas, y la hora para este modelo sale de media en un concesionario de Audi en Reino Unido sobre unos 160 euros.
Vía: Telegraph