Con motivo del próximo Salón de Ginebra que se celebrará el mes de Marzo, Opel ha anunciado una de sus primicias realizadas por su departamento Opel Performance Center siguiendo una tradición ya comenzada en el año 2002 con el prototipo OPC-Xtreme sobre la base del Astra G, con unos ensanches de carrocería atípicos y que nos dejaron babeando, literalmente.
¿Y cómo podemos catalogarlo? Pues básicamente, como una evolución del actual Astra OPC, para el que han tomado como inspiración el Astra OPC Cup del Campeonato Nürburgring de Resistencia (VLN), y hacerlo aún más radical y rápido.
Radicalidad, pero… ¿estará a la altura de las circunstancias?
Desde Opel no se han mojado mucho con las modificaciones concretas que pasará a incorporar, haciendo únicamente referencia a una reducción del peso del conjunto gracias al uso de elementos en fibra de carbono (algo que de seguro, agradecerá el modelo, porque es de los más pesados de su categoría), así como asientos de tipo baquet, arneses de seis puntos, estructura de seguridad integrada (imaginamos que se refieren a una jaula antivuelco, aunque no lo tenemos del todo claro). ¿Llegará a ser algo tan radical como lo fue el Mégane R26-R? En el que en opción, podía montar jaula antivuelco, además de prescindir del climatizador, todos los airbags excepto conductor, insonorizantes de la carrocería, etc.
Estéticamente, podemos observar también unas llantas de diseño específico, cuatro salidas de escape, lip frontal específico, alerón trasero de grandes dimensiones, así como una decoración exterior específica. Otra incógnita es la preparación mecánica que equipará, recordemos que el Astra OPC convencional homologa 280 CV derivado de un 2 litros turbo. Pero por limitaciones de su tracción (delantera), tampoco sería muy aconsejable elevar excesivamente dicha potencia.