A través de una presentación por parte de Peugeot, la semana pasada tuvimos ocasión de acudir a la región de Ribeauvillé en Francia a probar el último modelo que acaban de sacar del horno: el 2008. Un modelo que deriva del 208 y que tiene estética de crossover, y que es parte de los planes de la marca gala para su ofensiva comercial en muchos mercados donde quiere ser lider del segmento B.
Peugeot además le ha dado un enfoque global al modelo, de forma que se fabricará en tres continentes distintos Europa (Francia), América del Sur (Brasil) y Asia (China), a fin de poder abastecer la demanda de estos mercados y evitar las fluctuaciones de moneda y los caros aranceles. ¿Cuál se posicionaría como su principal rival? Sin lugar a dudas, el también recién presentado Renault Captur que además procede de una marca con la misma nacionalidad, sin embargo, existen otros rivales en su segmento como el Chevrolet Trax, Opel Mokka y Nissan Juke, entre otros.
Las previsiones por parte del fabricante son optimistas: de aquí a 2015, pretenden comercializar 200.000 unidades del 2008. Lo cierto es que juega con muchos argumentos a su favor para lograr tan codiciado objetivo, empezando por su enfoque global, una amplia gama de motores, amplias posibilidades de personalización y también de equipamiento. Sin embargo, hay otros aspectos que desgranar que no nos han gustado tanto, ¿te animas a hacerlo con nosotros?
Diseño
Pese a que han tomado como base el 208, Peugeot ha introducido numerosos cambios estéticos respecto a éste, ya que no se ha limitado únicamente a la instalación de protecciones plásticas. El 2008 tuvo un par de prototipos que sirvieron como base para la variante de producción, el primero de ellos el Urban Crossover Concept, presentado en el 2º trimestre de 2012 y el segundo de ellos denominado 2008 Concept, aún más fiel si cabe a la versión de producción y presentado a finales del 2012.
Cuenta con unas medidas de 4,16 metros de longitud, 1,74 metros de anchura y 1,56 metros de altura. Respecto a un 208, crece de forma moderada, con 20 centímetros más de longitud y 10 centímetros más de altura. Esto repercute directamente en beneficio de su habitáculo, que ve incrementadas varias de sus medidas.
En su exterior, una de las cosas que más llamativas nos pueden resultar son sus protecciones. Por ejemplo, el paragolpes delantero cuenta con una moldura plástica de color negro que abarca toda la zona inferior y que a su vez confluye con el protector de bajos de acero, para poder proteger mejor el cárter de aceite del motor. Estas protecciones plásticas también están presentes en los estribos del vehículo y en su paragolpes trasero. Otro elemento también llamativo son las barras en el techo, cada vez más usuales en modelos de corte familiar y/o SUV/crossovers.
Al igual que ocurre, por ejemplo, en el GTI, en el 2008, en los acabados más altos, cuenta con carcasas de los retrovisores cromadas, que se suman a otros cromados ya existentes como el de la parrilla delantera o el junco que rodea a los faros antiniebla delanteros.
Habitáculo
Aunque existen notables diferencias en su exterior, cuando entramos al habitáculo, en lo que respecta a diseño no encontramos grandes cambios. El salpicadero y paneles de puerta se mantienen prácticamente intactos. Además, dependiendo de la variante elegida y la tapicería, podremos encontrar una decoración diferente (por ejemplo, si elegimos la tapicería en cuero, también podremos encontrar parte del salpicadero tapizado, algo que da sensación de calidad general).
Uno de los aspectos que particularmente más me llamó la atención es el freno de mano. Sigue siendo de accionamiento mecánico, pero la palanca (carraca) para ponerlo es completamente diferente, mucho más ergonómica y tapizada. Personalmente, fue uno de los detalles que más me gustó. Recordemos que en otras variantes como la GTI o hatchback, el freno de mano es de tipo palanca (el convencional de toda la vida, vamos). Este cambio hace también que reciba una consola central específica.
Continúa manteniendo los detalles del resto de la gama 208, como el hilo iluminado alrededor de los relojes del cuadro, que es de color azul, igual que en los 208 convencionales (en el GTI es de color rojo, a juego con la tonalidad de los múltiples detalles del habitáculo, en el caso del 2008 no va a juego).
El salpicadero continúa estando presidido por una pantalla táctil de 7 pulgadas, desde la cual podremos controlar el sistema multimedia del coche firmado por la prestigiosa JBL, así como el navegador. El sistema multimedia admite conexión USB, Bluetooth y jack. Peugeot comercializa así mismo el denominado «Peugeot Connect Apps», un conjunto de aplicaciones que van instaladas en un pendrive USB que te vende la firma y que conectas al vehículo, para que a través de dichas aplicaciones, y tomando múltiples datos como autonomía, ruta, posición GPS, poder mostrar información útil. Sin embargo, es un servicio que requiere de suscripción anual (debido a que va por conexión 3G), y el coste es bastante elevado (estamos hablando de algo en torno a los 300 euros anuales, incluyendo ya la conexión 3G, a diferencia de otros sitemas como el R-Link de Renault donde puedes poner tu propia sim con conexión 3G, abaratando mucho el coste), además, particularmente, trasteamos un poco con él, y no nos acabó de convencer. Eso sí, a diferencia de otros 208 convencionales, el 2008 cuenta con dos tomas USB, de forma que puedes emplear simultáneamente las Peugeot Connect Apps y un pendrive USB con música.
Como comentábamos al principio del artículo, sus medidas incrementadas le permiten ofrecer mayor habitabilidad. El maletero crece 53 litros respecto al 208, quedándose en 338 litros (y continúa sin prescindir de la rueda de repuesto, aunque es de tipo galleta). Además, un detalle que me gustó bastante es la altura del borde de carga del maletero, que se encuentra a 63 cm respecto al suelo y gracias a esa cifra resulta muy útil a la hora de cargar objetos (esto no es así en otras versiones del 208).
Peugeot también ha optado por elevar la posición de conducción en el 2008, como es habitual en este tipo de vehículos, algo que unido a la visibilidad que confieren las puertas laterales al tener los paneles en una posición tan baja, hace que el 2008 tenga buena visibilidad en términos generales. Como resultado del aumento de medidas, también crece el espacio para las piernas de los ocupantes traseros.
En opción, puede equipar un techo panorámico de cristal (que por cierto, no es practicable), aunque quita distancia de separación entre la cabeza de los ocupantes, tanto delante como detrás. Si lo deseamos, en lugar del techo, también se pueden instalar unos LED decorativos en la tapicería del techo.