Desde que las plataformas de vídeo online como YouTube se pusieron de moda, rápidamente, muchos acudieron a ellas masivamente para demostrar sus ‘peripecias’ (por llamarlas de alguna manera) al volante. Y claro, ahí estaban las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado al acecho de todos aquellos que quisieran sacar músculo para procesarlos legalmente por los delitos que exponían públicamente.
A raíz de esto, y de un buen elenco de detenciones de las cuales prensa nacional se ha ido haciendo eco, la gente comenzó a ser mucho más precabida con distribuir vídeos en los que quebrantaran la legislación al volante, sin embargo, pese a todo, todavía seguimos viendo casos así.
El caso más reciente es un joven de 29 años de Cantabria que conducía su Porsche Cayenne Turbo (que para más inri, se encontraba la venta) a 272 km/h, tal y como figura en la instrumentación de su vehículo, todo ello, en una vía cuya velocidad máxima estaba establecida en 120 km/h, siendo por tanto un delito penal al exceder en 152 kilómetros por hora el límite establecido.
Inicialmente el vídeo fue publicado en Instagram y tras ser reportado a las autoridades, estas fueron capaces de determinar que las imágenes estaban grabadas el pasado 2 de Noviembre a las 10:10 en un tramo de la autovía A-231 en sentido León entre los kilómetros 124 y 13. Por su parte, el infractor, con el objetivo de dificultar la investigación, trucó el cuentakilómetros del vehículo para reducir su kilometraje y que así no correspondiera con el del vídeo, sin embargo, un técnico ha acreditado dicha manipulación.
Actualmente, los Juzgados de Burgos son los encargados de llevar el caso, el vídeo se encuentra eliminado de las redes sociales y el vehículo está intervenido. La hazaña le va a costar muy cara, desde luego…