Cuando vas a criticar a alguien, hay que estar seguros de lo que se va a decir, más aún cuando se trata de una empresa tan grande como Porsche. Los chicos de Greenpeace quisieron poner a la alemana como los trapos, y al final pasó lo contrario…
Mientras que la ONG trajo, entre otras cosas, un Cayenne Turbo con una nariz y orejas de cerdo, en la fábrica de Porsche se presentaron varios carteles muy grandes con unos datos curiosos a los que Greenpeace sólo pudo rendirse y aceptar la realidad.
Entre otras consignas, en los carteles se limitaron a poner que la contribución de CO2 a la atmósfera por parte de Porsche es menor al 0.1%, tener las mínimas emisiones por caballo del mundo, que éstas se verán reducidas en el año 2012 un 20%, y para finalizar, recordaron su motor híbrido en desarrollo, que permitirá un consumo de 9 litros a los 100km.
Ya hay quien califica a los chicos de Greenpeace por hipócritas al llevar allí un Cayenne Turbo rodando, cuando es precisamente lo que critican… ¿imagen? Quién sabe.
Vía: Autoblog
Verdes jajajajaaja freaks