A cada día que transcurre, la cotización de los Porsche clásicos aumenta de manera incesante. Dependiendo del modelo, es más o menos acusada, pero en todos ellos es común. Y tratándose de modelos clásicos, también tienen una característica inherente a todos los vehículos de la época: la escasa electrónica disponible -en comparación con los modelos actuales-, y por ende, la relativa facilidad para poder robarlos.
Es evidente que se ha generado una necesidad en torno a todos los propietarios de este tipo de modelos para poder mitigar al máximo posible los intentos de robo de sus modelos. Porque en ocasiones, ni tener un garaje individual, no aparcarlo nunca en la calle y tomar todo tipo de precauciones puede salvarte de que puedan sustraerte uno de tus bienes más preciados. Porsche ha respondido con el sistema Porsche Classic Vehicle Tracking System que hace uso de la tecnología GPS.
El sistema consiste en unos sensores autónomos que están integrados en varios puntos ocultos del vehículo, permitiendo que mientras el sistema está encendido, se envía de manera automática una señal de alerta en caso de que detectan que el automóvil se está moviendo, señal que también recibe el propietario del vehículo en su teléfono para confirmar si se trata de un falso positivo o si efectivamente están sustrayéndole el coche. Todo ello mientras también suena una alarma acústica para tratar de disuadirlos de sus fechorías.
Si el propietario confirma que no es un falso positivo, el sistema informa a las autoridades pertinentes con la ubicación exacta donde el vehículo se encuentra o en su defecto, la ruta por la que está circulando. También se puede dar la orden para que el motor no pueda volver a ponerse en marcha una vez se haya detenido. Este sistema además es capaz de funcionar si se retira la batería del vehículo que tratan de robar.
El propietario además podrá seguir en todo momento la ruta que está siguiendo el vehículo mediante su teléfono móvil. Pero adicionalmente a todo esto, cuenta con una función de ‘fronteras virtuales’ donde nos permite definir un radio geográfico del que no queremos que nuestro vehículo no salga y en caso de hacerlo, que nos alerte, incluyendo alertas por velocidad, especialmente útil cuando prestamos nuestro vehículo a un amigo.
Pensando también en las labores de mantenimiento en el taller o incluso el transporte en grúa, la alarma podrá ser desactivada a petición nuestra para ese tipo de situaciones durante un periodo de tiempo -por aquello de si se nos olvida volver a activarla-. Por el momento se desconoce su precio -variará en función del modelo-, si bien será valida para todos los modelos, incluyendo algunos Porsche 356 con baterías de seis voltios.
