Dos años han pasado ya desde el debut oficial del Porsche Mission E en guisa de prototipo y la expectación que continúa levantando es importante. Y es que no es para menos, ya que estamos hablando del primer modelo eléctrico de Porsche y aquel con el que la marca alemana tratará de competir frente a frente no solo con el Tesla Model S, sino con todas las berlinas premium eléctricas que estarán en el mercado en solo unos años. Para conseguir esta tarea, desde Stuttgart van a llevar a cabo una estrategia que se anuncia apasionante.
Podríamos resumir esta estrategia de forma que el Porsche Mission E será uno más en la gama de modelos que ofrecen a nivel global. No quieren que el Mission E sea el raro o ese Porsche, quieren que tenga la misma imagen y amplitud de ventas que el Panamera o el propio 911. Para conseguir esto, desde Porsche darán vida a una amplia gama de versiones que desde un principio estará disponible, y que se compondrá de al menos, tres diferentes: S, GTS y Turbo.
Empezando por la última, es interesante destacar que el Mission E Turbo no llevará turbocompresores como tal puesto que no contará con motor de explosión, pero sí añadirá modificaciones severas -e incluso un motor eléctrico extra- para elevar la potencia más allá de los 700 caballos, cifra que se torna ambiciosa pero muy asequible y viable. Yendo más allá, las versiones S y GTS irán un poco más lejos de los 450 caballos que rendirá el Mission E estándar -cifra aproximada-. Todas ellas irán unidas a un rango de autonomía interesante que en el mejor de los casos, estará por encima de los 550 kilómetros.