Porsche no da abasto con los pedidos de la familia 718, hasta el punto que el fabricante ha tenido que desviar parte de su producción a la fábrica del Grupo Volkswagen en Osnabrück, Alemania, cuya producción dará comienzo el próximo año. Pero… ¿cuáles son las causas para que se hayan visto abocados a tener que tomar esta decisión?
Si bien no es la primera ocasión en la que Porsche se tiene que apoyar en esta misma planta de Volkswagen para lograr despachar las unidades (ya lo tuvo que hacer recientemente en 2012 con el Boxster), lo cierto es que en este caso las causas que han propiciado esa situación son muy diferentes.
Como ya te comentamos aquí tiempo atrás, el relevo generacional del 718 será 100% eléctrico. En otras palabras, que ya no será posible contar con ninguna versión más con motor térmico, por lo que todos los fanáticos del modelo están aprovechando ahora para hacer sus pedidos, todo ello pese a que hasta mediados de la década no será cuando llegue ese modelo generacional que también seguirá estando conformado por un deportivo de dos puertas y un roadster.
No importa que Porsche se haya marcado como objetivo batir a los modelos existentes, cuya gama está conformada por el bóxer de cuatro cilindros de 300 CV del Cayman, los 350 CV del Cayman S, los 400 del Cayman GTS 4.0 y los 420 CV del GT4 , estos motores térmicos tendrán un encanto incomparable con los eléctricos, algo que los fans de la marca lo saben, y más en coches con un enfoque lúdico como los de la familia 718.
