Pese a que Porsche siempre ha estado muy ligada a los motores de combustión interna, es uno de los fabricantes europeos que más decididamente está apostando por la electrificación en la actual, una historia que comenzó con el Taycan y que ahora le está siguiendo con modelos como el Macan (ya presentado) o la gama 718 (por presentar).
Además, a diferencia de otros fabricantes que apuestan por el empleo de plataformas híbridas para poder seguir ofreciendo versiones de combustión y eléctricas, en Porsche con algunos de sus modelos han apostado directamente por plataformas eléctricas, manteniendo el modelo de combustión que ya estaba a la venta durante algún tiempo en paralelo para finalmente retirarlo y dejar únicamente el modelo eléctrico.
Véase el caso del Macan eléctrico, que actualmente se vende junto con la versión con motor de combustión sobre la anterior generación pero con fecha de caducidad, ya que han confirmado nuevamente que la producción de la misma finalizará en 2026, quedando únicamente el Macan eléctrico en el catálogo del modelo. Una apuesta cuanto menos arriesgada teniendo en cuenta la deceleración de las ventas de coches eléctricos en lo que llevamos de año.
Por su parte, los 718 Cayman y Boxster de combustión cesarán su producción a mediados de 2025. De hecho, en ambos casos, ya no se comercializan en Europa debido a la nueva normativa europea de ciberseguridad que no hace viable llevar a cabo una fuerte inversión en los mismos para poder seguir comercializándolos hasta su final de ciclo de vida, aún incluso en el caso de los 718 donde todavía no ha llegado el sucesor.
Estas informaciones han sido confirmadas por un directivo de Porsche conocido como Albrecht Reimold, que no sólo lo ha confirmado, sino que además ha confirmado que está feliz de que en el catálogo actual encontremos eléctricos, híbridos enchufables y modelos con motores de combustión interna.
Vía: Automobilwoche
