Con un debut previsto para las próximas semanas en el Salón del Automóvil de Los Ángeles, la tercera generación del Mercedes CLS se postula apasionante y se deja ver por primera vez de esta guisa, mostrando parte del frontal y elementos vitales como las ópticas delanteras. Pero más allá, los cambios más importantes no residen en lo que vemos ahora, sino en el resto de la carrocería y sobre todo, en la línea trasera.
A la venta desde principios de 2010, la segunda generación del Mercedes CLS marcó la continuidad de un precedente que no fue más que un rotundo éxito. Y es que en su momento, el CLS marcó un pequeño pero rotundo hito en la firma alemana, dominando de punta a punta el mercado de las berlinas-coupé y anotando un tanto muy importante desde mediados de la pasada década. Una época gloriosa que con los años no se ha diluido, pero sí atenuado dada la extensa competencia, y el giro del mercado hacia otros segmentos.
Cabe destacar que el Mercedes CLS que veremos debutar de manera preliminar en el SEMA Show contará con una caída del maletero aún más pronunciada que el CLS actual. Mercedes-Benz quiere una berlina-coupé más acentuada e inclinada hacia este segmento, y en lo que respecta a las versiones de alto rendimiento, el CLS no estará disponible en guisa AMG CLS 63, pero sí en CLS 53. ¿El motivo? Como ya te contamos en MotorAdictos, Mercedes-AMG ya está desarrollando el AMG GT sedán, y en lo que respecta a potencia y capacidades dinámicas, es incompatible con el CLS 63.
