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Seguimos adelante con la prueba que estamos realizando a uno de los compactos más bellos del panorama actual, el Alfa Romeo Giulietta. Para la ocasión hemos contado con una unidad equipada con el nuevo propulsor de dos litros y 150 CV, que mejora en todo a la anterior versión de 140 CV.
La primera parte de la prueba estuvo dedicada al análisis del diseño, el habitáculo y la mecánica del Giulietta, en la que prestamos especial atención a contarte las novedades con las que se había presentado la actualización que aterrizó hace unos meses, si todavía no la has leído puedes hacerlo aquí.
Hoy nos centraremos en los distintos niveles de equipamiento y precios con los que se puede adquirir el Giulietta en la actualidad, así como en su dotación de elementos de seguridad.
También nos pondremos al volante para transmitirte de primera mano las sensaciones que es capaz de producir el conjunto mecánico con el que han dotado al Giulietta, para finalmente dejarte con una extensa galería de fotos para que puedas detenerte a observar todos sus detalles.
Equipamiento
El propulsor JTDm de 150 CV viene asociado al acabado Distinctive, que con un precio de partida ??descuentos de marca aplicados- de 22.800 euros ofrece de serie elementos como el spoiler trasero, el sistema multimedia Uconnect con bluetooth, USB y AUX, control de crucero, faros antiniebla, elevalunas eléctricos, guantera refrigerada, climatizador bizona, volante y pomo del cambio en piel, sensores de lluvia y luces, espejos exteriores abatibles eléctricamente, sensores de aparcamiento traseros, sensor de presión de los neumáticos, llantas de aleación de 16 pulgadas y rueda de repuesto de tamaño reducido.
Además de esto, nuestra unidad incluía faros de xenón -852 euros-, sensores de aparcamiento delantero -250 euros-, techo solar doble -1.231 euros-, tapicería de cuero rojo -1.450 euros-, pintura plata Alfa -525 euros- y el Pack QV Sportiva -2.676 euros-, que incluye el tercer apoyacabezas posterior, reposabrazos central trasero, salpicadero oscurecido, suspensión deportiva rebajada, asiento de pasajero regulable en altura, pedales de aluminio, pinzas de freno de color rojo, cristales oscurecidos, llantas de aleación de 18 pulgadas, faldones laterales, asientos delanteros deportivos, volante con costuras rojas, etcétera.
En lo que a seguridad respecta, el Giulietta incluye 6 airbags, anclajes ISOFIX en plazas traseras, control de estabilidad con asistente de arranque en pendiente, control de tracción con diferencial electrónico Q2, asistente de frenada y reposacabezas delanteros activos.
El precio de partida es bastante atractivo, sobre todo si tenemos en cuenta la extensa dotación de serie que incluye, que siempre puede ser completada a golpe de billetera hasta configurar un coche realmente completo como el que hemos podido poner a prueba. Aun así, siguen echándose en falta elementos con los que cuentan muchos de sus competidores, y que en el Giulietta no se ofrecen ni como opción, como el sistema anti-colisiones frontales, detector del ángulo muerto, cámara de visión trasera o acceso y arranque sin llave.
Comportamiento
El Giulietta es un coche que te enamora con su estética, te ofrece un habitáculo deportivo en el que ponerte cómodo y que termina por convencerte cuando te pones a sus mandos. Su conducción es muy gratificante y divertida, y este motor en particular se posiciona en un término medio capaz de ofrecer unos consumos bajos para el día a día y una buena respuesta para esos momentos en los que apetece salir a disfrutar de la carretera.
En uso urbano, este compacto es ágil y silencioso, gracias a una optimización de su insonorización que ha venido con su renovación. El motor es suave y progresivo, y el sistema start&stop realiza su función sin brusquedad y de forma imperceptible. Aunque nuestra unidad equipaba sensores de aparcamiento delanteros y traseros, he echado en falta la incorporación de una cámara trasera.
En ciudad es sencillo conseguir consumos por debajo de los siete litros sin prestar demasiada atención a conducir de forma eficiente, una cifra bastante buena que ha ayudado a que tras una semana de prueba en la que hemos alternado todo tipo de situaciones, el contador de consumos marcara una cifra media de 5,9 litros a los 100.
En carretera es donde de verdad se disfruta de la conducción del Giulietta, con un tacto de dirección perfecto que ayuda a trazar las curvas de forma milimétrica. El tarado y disposición de las suspensiones también ayuda a que este italiano cuente con un gran comportamiento cuando lo acercamos a sus límites, momento que el Giulietta aprovecha para respondernos con una gran sensación de control y seguridad.
Para rematar, contamos con un selector situado delante de la palanca de cambios -DNA- que nos permite escoger entre tres modos diferentes de conducción: Dynamic, Natural y All Weather. Con el selector en modo Natural, todos los sistemas del coche se orientan al confort de marcha y a conseguir consumos bajos. Si escogemos el modo Dynamic, la dirección se vuelve más firme, el acelerador responde de forma más enérgica, los sistemas electrónicos de tracción se vuelven más permisivos y se modifica la curva de Par, para poder contar con los 380 Nm de los que presume.
Por último, existe el modo All Weather, que es recomendable para situaciones en las que la tracción se ve comprometida. La respuesta del motor se vuelve moderada para evitar que las ruedas patinen, y los sistemas electrónicos se agudizan para conseguir ese mismo propósito.
El sistema de suspensión no solo ofrece un buen comportamiento dinámico gracias a su firmeza, sino que consigue filtrar de forma más que aceptable la mayoría de las irregularidades de la carretera. El equipo de frenos también tiene un tacto y respuesta satisfactorios, y no presenta signos de fatiga tras un uso continuado.
Conclusión
Pese a los años que lleva en el mercado sigue siendo un coche con un diseño realmente fresco y atractivo. Su habitáculo cuenta con una buena calidad de materiales y ajustes, y ofrece un ambiente deportivo al alcance de solo unos pocos. El nuevo motor de 150 CV ha dado un gran salto con respecto a su predecesor, con unos consumos realmente bajos y una respuesta satisfactoria.
Los cambios introducidos en este MY 2014 son bastante acertados, aunque deberían haber sido más ambiciosos e incluir más posibilidades de equipamiento. La nueva pantalla del sistema multimedia tiene una buena respuesta y los menús son atractivos e intuitivos, pero su tamaño se queda corto para desplegar todas sus funcionalidades.
Con la puesta al día que acaba de recibir, y en especial con esta nueva motorización de 150 CV, el Giulietta vuelve a postularse como una gran alternativa a la hora de adquirir un compacto completo, ya que es bonito, bien acabado, ahorrador y divertido de conducir, todo ello a un precio razonable.
Alfa Romeo Giulietta JTDm 150 CV
