Una semana más volvemos en Motoradictos con una de esas pruebas que seguro te gustará, una prueba totalmente diferente a la que realizamos hace algunos días sobre el atractivo y juvenil Opel Astra GTC (parte 1, parte 2) pero que seguro te llamará la atención, no es para menos ya que el elegido ha sido el radical MINI Countryman Cooper D.
Como su nombre indica este MINI de gran tamaño es la versión diésel intermedia, es decir, queda por debajo el MINI One D de 90 caballos y por encima el MINI Countryman Cooper SD de 143 caballos, quizás la opción más interesante, aunque también más cara económicamente, debido al tamaño y prestaciones del vehículo. Sin más, te invito a que nos acompañes a lo largo de esta prueba.
Estética
Quizás una vez hablamos de estética entremos a tratar uno de los puntos fuertes de este modelo, un punto más que cuidado por lo diseñadores de la marca a lo que ni cortos ni perezosos se les ocurrió que lo mejor para el futuro de la marca era precisamente el combinar dos conceptos totalmente diferentes como es el de un MINI como hasta ahora lo conocíamos con el de un SUV.
Debido a esta genial idea nace el MINI Countryman, un modelo que en sus inicios básicamente se podría catalogar como incomprendido pero que finalmente ha demostrado que gracias a una versatilidad poco común en un modelo de este tipo y al hecho de ser básicamente un MINI con cinco puertas las cosas pueden ser diferentes a lo esperado.
Una vez con las llaves en la mano lo primero que me llega a la cabeza es? ¿de verdad es un MINI?, es decir, ¿mostrará esa esencia que ha conseguido hacer famosa a la nueva MINI ideada por los ingenieros de BMW?, digo esto ya que lo que tengo ante mi es un enorme vehículo parecido a lo que creía era un MINI y que destaca precisamente por ser el primero de la marca en superar los 4 metros de largo, concretamente 4.09 metros de largo, 1.78 metros de ancho y 1.56 metros de alto.
Como ves, seguramente no te llame en absoluto la atención el hecho de que, en cuanto a medidas, sea prácticamente igual al BMW X1, no es para menos ya que ambos comparten la misma plataforma lo que a fin de cuentas seguro gustará a todos sus compradores y que permite que el ??extraño? MINI pueda montar o no tracción integral a las cuatro ruedas.
Una vez situados es el momento de fijarnos en la peculiar estética del modelo que, empezando por el frontal deja claro que, aunque un concepto diferente, sigue siendo un MINI, algo que se nos queda muy claro al fijarnos en la enorme parrilla frontal. Aun así, es precisamente en el frontal donde nos damos cuenta de que este modelo plasma un diseño mucho más atrevido y vanguardista, algo que al menos de forma personal, empezaba a echar de menos en todo lo que hasta ahora fabricaba MINI
Una vez abandonados los rasgos propios de un frontal con mucha personalidad y moviéndonos por el lateral del conjunto encontramos un vehículo en el que no se ha querido para nada simular las líneas de comienzo y fin del habitáculo, tal es el caso que en esta búsqueda por romper la línea base se ha querido romper con la monotonía del color de la carrocería gracias a unos pilares pintados en color negro y la posibilidad de que el techo de este SUV esté totalmente personalizado, algo muy habitual en todo lo que huele a MINI.
En la trasera quizás lo únicos más llamativo sea precisamente, algo que es de agradecer como la enorme boca de carga, algo fundamental en este tipo de vehículos y que ha sabido solventarse de una forma sencilla y muy vistosa. Como dato, mencionar la ventanilla de gran tamaño situada entre la puerta de las plazas traseras y el portón, algo que ayuda a ofrecer una vista panorámica de 360 grados y que se traduce en un interior mucho más luminoso y acogedor.
Interior
En el interior encontramos la principial respuesta a todos los amantes de la nueva MINI pero que no se atreven ha hacerse con una unidad debido al escaso espacio interior, habitualmente un habitáculo pensado, como buen coupé, para el uso y disfrute de los pasajeros delanteros pero muy escaso para cualquiera que ose ocupar las plazas traseras.
Como decía, si eres uno de esos amantes de todo lo que presenta la ??nueva? MINI seguramente ya no tengas excusas para hacerte con una unidad, concretamente un fabuloso MINI Countryman cuyo habitáculo destaca por el enorme hueco del que disfrutarán todos los pasajeros así como por la cantidad de detalles que por cierto destacan por la gran terminación de los mismos.
Como es lógico, no por ser mayor iba a ser diferente, es decir, a un vehículo mucho más grande y espacioso se une un interior con todos esos elementos que hacen diferente a todos los MINI que hasta ahora pueblan nuestras calles. Debido a esto, no tienes que preocuparte de no sentir que conduces un MINI ya que todo lo que te rodea huele a esta mítica marca.
Como curiosidad, quizás lo más destacable es ese mítico botoncito que seguro gustará a todos los propietarios de uno de estos modelos, botón que se localiza en el techo del modelo y que está destinado a cambiar el color de las luces que decoran el interior, quizás uno de los detalles, conjunto al tacómetro con navegador incluido situado en el centro de la consola, que mejor definen a MINI.
Para finalizar, tan sólo me gustaría destacar algo tan simple como la capacidad de un maletero que, en esta ocasión crece hasta los 350 litros, algo impensable hasta ahora cuando hablábamos de un MINI. Como es lógico, abatiendo los asientos traseros la capacidad del mismo aumenta hasta los 1.170 litros.
Enlaces: Prueba MINI Countryman Cooper D (parte 2)
Fotos: SMJ