Finalmente, nos ponemos a las manos de la quinta generación del exitoso urbano alemán en su presentación nacional a los medios. Nos referimos al Opel Corsa, un producto que tradicionalmente ha contado con una excelente acogida en nuestro país, por haber sido un modelo que tradicionalmente ha sabido resultar muy competitivo a nivel de relación calidad/precio. Y sin dejar de jugar con estas bazas, con esta quinta generación Opel quiere seguir puliendo su pequeño diamante.
El Corsa, además, es un producto que podríamos considerarlo prácticamente español: del total de unidades producidas hasta la fecha entre todas sus generaciones desde el año 1982 (12,4 millones de unidades, ahí es nada), el 80% se han producido en la fábrica que posee General Motors en Figueruelas (Zaragoza).
Diseño
El diseño, lejos de recibir una evolución radical respecto a su antecesor, ha sabido adecuarse de forma más que correcta a los nuevos tiempos, ofreciendo una imagen más moderna y también acorde a la gama actual. El acercamiento estético con el Adam es innegable, pero se apuesta por una parrilla delantera de un tamaño considerablemente mayor y situada en una parte más baja, además de contar con unas líneas más esculpidas y dinámicas en su capó.
Aunque en su generación anterior, los faros delanteros presentaban unas formas curvadas agradables a la vista, ciertamente les faltaba algo de carácter, carácter que logra ahora cosechar con la nueva forma recibida, a lo que ayuda también la disposición de la luz diurna LED. En la parte inferior del paragolpes podemos encontrar unos faros antiniebla que se ven envueltos en un junco cromado y un plástico negro, y que confluyen perfectamente con las líneas de la parte inferior.
En la zaga, los grupos ópticos nos recuerdan mucho a la actual generación del Astra (a la que por cierto, no le queda mucho tiempo de vida), y que cambian por completo la disposición de los anteriores que abrazaban la aleta trasera. En este caso, aunque siguen reposando sobre ella, se ha logrado jugar mucho mejor con el equilibrio aprovechando la anchura de la misma para culminar sobre parte de la óptica.
Continúan habiendo dos variantes de carrocería: tres y cinco puertas. La de tres cuenta con uan línea más deportiva gracias a la caída del techo en el pilar C, algo que queda especialmente patente en la forma de las ventanillas traseras también.
Hay que destacar en cualquier caso que la versión analizada es un OPC Line, un kit estético que asemeja su aspecto al de la variante OPC que llegará próximamente al mercado y que suma unas llantas de aleación específicas, lip en el paragolpes delantero, nuevos faldones laterales, alerón trasero específico, además de detalles de color negro, emblemas OPC Line y salida de escape cromada. También introduce algunos cambios en el habitáculo, que detallaremos en el siguiente apartado. Su precio puede antojarse elevado: 870 euros, y este precio sólo atañe al paquete exterior, ya que el interior se paga aparte.
Habitáculo
El habitáculo apuesta por unas formas mucho más vanguardistas y llamativas. Es evidente que se trata de un vehículo dirigido a un target de gente joven, por lo que sus principales bazas dentro de él deben ser el sistema de infoentretenimiento y las posibilidades de personalización, aspectos que se han potenciado especialmente.
La anterior generación del Corsa no destacaba especialmente por la calidad de los materiales empleados ni por su vistosidad, recibiendo ahora más plásticos mullidos (especialmente destacable el de la parte superior del salpicadero) y de mejor aspecto.
Cuando nos subimos por primera vez, si tendemos a seguir haciendo comparaciones con su antecesor, también podemos apreciar el trabajo hecho en materia de simplificación de los controles, eliminando muchos botones (como cada vez resulta mayor tendencia). Los asientos presentan un tejido colorido y un mullido my agradable, además, el agarre lateral sin ser un coche de pretensiones deportivas nos ha parecido más que correcto.
El sistema de infoentretenimiento se confía al IntelliLink ya conocido en Opel compuesto por una pantalla de siete pulgadas rodeada de un plástico negro brillante que se extiende al resto del salpicadero. Si bien este sistema es opcional, resulta una opción muy interesante dado su bajo precio: sólo 250 euros. El manejo de dicho sistema resulta algo incómodo por el hecho de que la pantalla está situada en una posición muy baja (aunque con una ligera inclinación), algo que puede provocar distracciones.
Una de las ventajas del IntelliLink es la gran interacción que ofrece con terminales Android e iOS, ofreciéndonos la posibilidad de acceder a galería de vídeo y fotos, radio en streaming, navegación GPS o podcasts. Además, para la interconexión, ya no es necesario hacerlo por cable, se puede realizar vía Bluetooth, si bien, tendremos que acabar recurriendo al cable -en este caso de carga- para evitar que nuestro móvil se nos quede sin batería dada la alta carga de trabajo que le solicitaremos y que drenará la batería de forma mucho más rápida.
Mecánica
La gama de motores oscila entre los 75 y 115 CV. Concretamente, la forman cuatro opciones gasolina (1.4 de 75 CV, 1.4 de 90 CV, 1.4 Turbo de 100 CV y 1.0 Turbo de 115 CV) y dos diésel (1.3 CDTI de 75 CV y 1.3 CDTI de 95 CV).
Nuestra elección para realizar la pequeña prueba dinámica fue el 1.4 Turbo de 100 CV. ¿Cuál es la diferencia que presenta respecto al 1.0 ECOTEC de 115 CV? La más importante, es que el 1.0 es de tres cilindros, mientras que el 1.4 por su parte es de cuatro cilindros.
Y te preguntarás, ¿cuál me conviene más? No resulta una pregunta fácil de responder. Evidentemente, si buscamos refinamiento y ausencia de vibraciones típicas de un tricilíndrico, la opción está más que clara, pero otro aspecto también a tener en cuenta es el par motor. El 1.4 cuenta con 200 Nm entre las 1.850 y 3.500 vueltas, es decir, 30 Nm de par adicionales que pueden ser muy aprovechables en según que circunstancias.
Este motor cifra su consumo homologado en 5,2l/100 km. Durante nuestra prueba, el ordenador marcaba cifras en torno a los 6l/100 km combinando conducción dinámica con conducción relajada, por tanto, nos parece un consumo más que razonable. El 1.0 ECOTEC Turbo declara 4,9l/100 km, por lo que como puedes ver, la diferencia no es especialmente considerable para ser el factor principal que nos haga elegir uno u otro propulsor.
El Corsa realiza con esta motorización el 0-100 km/h en 11 segundos, mientras que su velocidad máxima se sitúa en los 185 km/h.
