Continuamos con la segunda parte de la prueba a este peculiar vehículo, un atractivo Mazda 3 equipado con el estupendo 2.2 turbodiesel de 150 caballos, un vehículo que seguro no dejará indiferente a nadie y que ahora pondrá en marcha su bloque para mostrarnos precisamente de qué es capaz.

Como recordarás, en la primera parte de la prueba ya hablábamos sobre las peculiaridades estéticas de este compacto así como de su habitabilidad interior, destalles de equipamiento o sobre su maletero, algo que obviaremos en esta segunda parte en favor de detalles mucho más técnicos sobre su comportamiento dinámico y las prestaciones de su suculento motor.

Mecánica y Comportamiento

Tal y como se menciona en el título o dejamos caer en la primera parte de la prueba, ante nosotros tenemos un atractivo compacto de 4.460 mm de largo, 1.755 mm de alto con 1.470 mm de ancho, un modelo de proporciones bastante generosas que se mueve, en esta ocasión, gracias a un motor bautizado por Mazda como 2.2 MZR-CD.

Pasando a los detalles más significativos del motor estamos ante una arquitectura de cuatro cilindros en línea montando transversalmente, un motor common-rail de inyección directa sobrealimentado por un turbocompresor de geometría variable que gracias a sus 2.184 cc de cilindrada es capaz de ofrecer 150 caballos y 360 Nm de par máximo entre las 1.800 rpm y las 2.600 rpm.

Precisamente este es uno de los problemas del modelo con este motor, es decir, si circulas por debajo de las 1.500 rpm verdaderamente se nota un motor falto de carácter o ??muerto? y no es hasta rozar las 1.800 rpm, sobre las 1.600 más o menos, cuando el motor empieza a latir y demostrar su verdadera capacidad. Por encima de las 2.800 el motor tiene poco empuje aunque todavía tiene vida hasta pasadas las 3.500 rpm.

Como se puede ver en las fotos, el motor, al menos en nuestra unidad de pruebas, va asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades, una caja de cambios de recorridos bastante cortos y precisos que destaca por una sexta muy larga, algo que a fin de cuentas ayuda cuando viajamos por autovías/autopistas a velocidad de crucero ya que a velocidad legal el cuentarrevoluciones roza las 2.000 rpm.

Con todos estos datos en la mano llega el momento de ponernos el cinturón y descubrir por nosotros mismo qué puede ofrecer o no este vehículo. Antes de nada toca un pequeño paseo por ciudad donde te darás cuenta precisamente de su falta de potencia a bajas vueltas, algo que quizás seguro a penas notarás ya que por la misma normalmente se suele viajar a velocidades muy moderadas.

Aun así, hay que tener precisamente en cuenta este dato, ya que por debajo de las 1.500 vueltas el modelo no tiene el empuje que nos gustaría, algo bueno para no elevar el consumo en ciudad pero que puede convertirse en una navaja de doble filo si en un momento determinado queremos un ??extra? de aceleración como en carretera convencional y no reducimos una o dos velocidades.

Como ves, aunque con mucha potencia para el día a día hay que saber precisamente y sobre todo recordar el tipo de coche que estamos conduciendo, tras esto, llegamos a autovía donde verdaderamente estamos ante ??una balsa de aceite?, es decir, el Mazda3 es todo un ejemplo cómo un vehículo de estas características puede circular a 120-130 km/h sin penalizar lo más mínimo en los consumos aunque debido a la dureza de sus asientos seguramente estarás deseando hacer un descanso una vez sobrepases los 200 km.

Precisamente y hablando de consumos encontramos que, siempre según el ordenador de a bordo de nuestra unidad de pruebas, el modelo que según Mazda homologa 5.4 litros/100 km eleva su medida hasta unos más que correctos 6.7 litros/100 km de media. Dejando de lado las medias por ciudad el consumo medio siempre estuvo bastante por debajo de los 8.0 litros/100 km mientras que en autovía el consumo a su vez desciende hasta los 5.5 litros/100 km de media.

Fuera de todo esto toca el momento de coger nuestro Mazda3 y olvidarnos de consumos y demás en una buena carretera de curvas donde verdaderamente el vehículo japonés demostrará de qué es capaz cuando se pide ese ??extra? del que hablábamos hace un rato y que puede hacer que nos decantemos o no por la compra de este vehículo.

He de decir llegados a este punto que, si mecánicamente hasta el momento el coche me parecía más que digno de elogiar en este punto fue precisamente donde más me sorprendió gracias a una carrocería que apenas se balancea, asientos duros que te sujetan perfectamente sin movimientos extraños y una dirección con la que podrás llevar el Mazda3 prácticamente por donde quieras en una curva.

Como es lógico, si lo buscas lo encuentras y si lo que quieres es hacer que el coche pierda tracción tan sólo tendrás que entrar en una curva o rotonda un poco más ??pasado? de lo que deberías. Como es lógico, a la más pequeña insinuación de que el coche está perdiendo tracción el DSC hace acto de presencia y controla todos nuestros movimientos. Sin más, dar mi enhorabuena a los ingenieros de Mazda por lograr una puesta a punto tan buena.

Equipamiento

A nivel de equipamiento tenemos que tener muy en cuenta que estamos ante el acabado Sportive, uno de los acabados más elevados en cuanto a equipamiento y que seguro será el que elijas sobre todo teniendo en cuenta, al menos a mi parecer, que el resto se queda algo ??escaso?

Entre los detalles más interesantes encontramos elementos como llantas de aleación de 17 pulgadas, paragolpes, spoiler y tiradores de las puertas pintadas en color de la carrocería, tubo de escape cromado, sensores de luz y lluvia, retrovisores exteriores plegables y ajustables eléctricamente, espejo retrovisor interior fotosensible, sensor de aparcamiento trasero, sistema de apertura y arranque sin llave, control de velocidad, elevalunas en todas las puertas, climatizador bizona, asientos deportivos, volante y palanca de cambios tapizados en cuero?

Por otro lado y todo integrado en el mismo sistema encontramos el navegador con pantalla táctil. Un completo sistema multimedia con mapas y sistema de navegación TomTom que a su vez ofrece entrada auxiliar USB y Bluetooth o el asistente de cambio de carril RVM por el que se encenderá una luz en los espejos retrovisores si tenemos alguna clase de vehículo en nuestro ángulo muerto

Precios y Conclusiones

Antes de darte mi opinión personal sobre un vehículo del que hemos podido disfrutar durante una semana y sobre todo tras algo así como 1.200 km prefiero hablar precisamente de la lista de precios oficiales de este modelo en todas sus versiones, una lista de precios bastante extensa donde seguro encontrarás la versión idónea para ti

• Mazda3 5p 1.6 VVT Pulse 105 caballos – 17.850 euros
• Mazda3 5p 1.6 VVT Style 105 caballos – 18.850 euros
• Mazda3 5p 1.6 VVT Style+ 105 caballos – 20.000 euros
• Mazda3 5p 2.0 DISI Luxury 151 caballos – 22.250 euros
• Mazda3 5p 2.0 Luxury Automático 150 caballos – 24.200 euros
• Mazda3 5p DISI Sportive 151 caballos – 23.800 euros
• Mazda3 5p DISI Sportive Pack Premium 151 caballos – 25.300 euros
• Mazda3 5p 1.6 CRTD Pulse 115 caballos – 19.950 euros
• Mazda3 5p 1.6 CRTD Style 115 caballos – 20.350 euros
• Mazda3 5p 1.6 CRTD Style+ 115 caballos – 21.500 euros
• Mazda3 5p 2.2 CRTD Luxury 150 caballos – 25.350 euros
• Mazda3 5p 2.2 CRTD Sportive 150 caballos – 25.350 euros
• Mazda3 5p 2.2 CRTD Sportive Pack Premium 150 caballos – 26.850 euros
• Mazda3 5p 2.2 CRTD Sportive 185 caballos – 26.500 euros
• Mazda3 5p 2.2 CRTD Sportive Pack Premium 185 euros – 28.000 euros
• Mazda3 Sportsedan 1.6 VVT Pulse 105 caballos – 18.350 euros
• Mazda3 Sportsedan 1.6 VVT Style 105 caballos – 19.350 euros
• Mazda3 Sportsedan 1.6 VVT Style+ 105 caballos – 20.500 euros
• Mazda3 Sportsedan 1.6 CRTD Pulse 115 caballos – 20.450 euros
• Mazda3 Sportsedan 1.6 CRTD Style 115 caballos – 20.850 euros
• Mazda3 Sportsedan 1.6 CRTD Style+ 115 caballos – 22.000 euros

Finalmente ha llegado el momento de dar mi opinión personal sobre este atractivo compacto, un modelo que seguro gracias a su afilada estética te cautivará, sobre todo si te decides por el actual restyling. Aun así, en este caso intentaré no centrarme en esas pequeñas pegas que todo coche tiene y ser mucho más objetivo quejándome de lo verdaderamente incómodo.

En esta línea la primera viene con las plazas traseras, un lugar que verdaderamente me estresa, sobre todo en este modelo ya que si el espacio para un par de adultos es más que suficiente el espacio para acceder a las mismas es relativamente pequeño, será que Mazda va al contrario de todo el mundo, ya que la principal pega del resto de fabricantes es precisamente que hacen plazas reducidas pero las puertas de acceso bien hermosas.

Por otro lado no me ha gustado nada el botón para el control de crucero, creo que su localización deberían estudiarla mucho mejor, solo eso, esas son para mí los principales inconvenientes del modelo ya que a pesar de ser un compacto no me cansaré de decir que es sumamente atractivo a la vez que rezuma deportividad por sus cuatro costados.

Sobre el motor, sublime y de comportamiento ejemplar, un 2.2 litros potente y rápido gracias a sus 150 caballos de potencia que a su vez muestra un consumo medio de 5.6 litros ¿se puede pedir más? Si, como ya hablamos en su momento quizás algo más de par a bajas vueltas, aunque esto por otro lado, facilita su conducción por ciudad sin necesidad de dar tirones.

Sin lugar a dudas, un vehículo con el que, siempre que te guste la deportividad y goces conduciendo, encontrarás tu media naranja. Una vez más, bien por los chicos de Mazda ya que han conseguido, para mí, uno de los compactos más interesantes del sector

Prueba Prueba Mazda 3 2.2 CRTD Sportive 150 caballos

Fotos: SMJ