Finalmente llegamos a la segunda parte que en MotorAdictos estamos realizando a uno de los compactos de tamaño pequeño más famosos del mercado, concretamente hablamos del Volkswagen Polo 1.4 TDI BMT de 75 caballos, un vehículo que en esta generación puede ofrecer mucho más de lo que puedes llegar a imaginar.
Tal y como hablamos en la primera parte de la prueba no solo estamos ante un compacto que se renueva estéticamente para asemejarse aún más al resto de la gama, sino que en cuanto a la calidad y diseño presentes en el habitáculo desde Volkswagen se ha buscado un acercamiento muy profundo con el Volkswagen Golf por lo que, al menos en cuanto a calidad, poco o nada tiene que ver con la generación precedente.
Equipamiento
En este primer apartado, como ya es costumbre en todas nuevas pruebas, nos centraremos en un primer momento en la seguridad que puede ofrecer un vehículo de estas características. En este caso en concreto todos los Volkswagen Polo viene equipados de serie con elementos como control de estabilidad, cinturones de seguridad de tres puntos, airbags frontales y laterales, protección para la cabeza, control de tracción, ABS, asientos ISOFIX, sistema Stop&Start. La única opción en este apartado es el airbag de cortina para los asientos posteriores (715 euros).
A nivel exterior el Volkswagen Polo cuenta de serie con llantas de aleación de 14 pulgadas, pintura solida, rueda de repuesto de tamaño normal, cristales tintados, retrovisor exterior del conductor y del acompañante con ajuste eléctrico y desempañado. Como opción quedan elementos como gancho de remolque (765 euros), pintura efecto perla (395 euros), pintura lisa (185 euros) o pintura metalizada (395 euros).
Moviéndonos hacia el interior nos encontramos con elementos como indicador de baja presión para los neumáticos, luz para el maletero, regulación de los faros, elevalunas eléctricos, cierre centralizado con mando, asientos delanteros con ajustes manuales o equipo de audio con reproductor de CD/MP3 con seis altavoces.
Comportamiento
Tal y como comentábamos al final de la primera parte de la prueba, el vehículo que ves en pantalla está equipado con el nuevo motor de tres cilindros y 1.4 litros que acaba de lanzar Volkswagen precisamente para servir de relevo generacional a los 1.2 TDI y 1.6 TDI de la anterior generación.
En este caso en concreto estamos ante la versión de 75 caballos y 180 Nm de par máximo, un motor capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 13.9 segundos alcanzando una velocidad máxima de 173 km/h. En primer lugar, comentarte que una vez te pones a sus mando puede parecer que estamos ante un motor quizá no demasiado vigoroso a bajas vueltas, tendrás que hacer unos cuanto kilómetros precisamente para darte cuenta que si en algo destaca este vehículo es precisamente en su progresión, un motor suave donde se ha buscado la máxima eficiencia posible.
Sin lugar a dudas un apuesta a punto mecánica muy interesante, sobre todo si tenemos en cuenta que estamos ante la versión de 75 caballos, es decir, un compacto de pequeñas dimensiones y potencia contenida, idóneo para tu día a día en ciudad, sobre todo gracias a un consumo muy contenido. Precisamente a conseguir estos resultados contribuye notablemente una caja de cambios de cinco velocidades con una relación bastante larga.
Después de todo esto llega el momento de ponernos al volante de este simpático compacto, un vehículo que debido a su potencia tan ajustada se muestra desde un principio muy noble y lineal, sobresaliente para todo aquel que quiere circular por ciudad de manera tranquila y relajada mientras que la agilidad está totalmente garantizada, atributos que se pueden extrapolar perfectamente al comportamiento del mismo en carretera abierta.
Es precisamente en carretera abierta donde está su mayor complejo debido precisamente a la falta de potencia tendremos un problema a la hora de intentar adelantar en carreteras de doble sentido. Uno de los aspectos que más me llamó la atención durante toda la prueba es precisamente la insonorización del habitáculo, algo muy a tener en cuenta sobre todo cuando hablamos de motores tan ruidosos como los de tres cilindros.
Debido precisamente a la configuración del modelo no me pareció oportuno hacer alguna excursión o escapada a algún tramo de curvas ya que ni mucho menos estamos ante un compacto de corte deportivo. Para los que busquen mucha más diversión quizá sería una buena idea decantarse por un Volkswagen Polo en su versión GTI o directamente, sobre todo si buscas exclusividad por la versión limitada WRC.
Conclusión
Llegamos al apartado final de nuestra prueba. Antes de continuar comentarte que hacerte con un Volkswagen Polo 1.4 TDI BlueMOTION es hablar de un compacto caro, más que el resto de sus rivales en el segmento ya que hablamos de un 16.610 euros (a este precio hay que descontar posibles promociones o descuentos).
Aun así, no todo es malo ya que hay que reconocer por otro lado que en cuanto a equipamiento incluido de serie y calidad del habitáculo en general también la última generación del famoso compacto alemán es muy superior a la del resto de sus rivales por lo que, en principio, pagar más no debería ser un problema, al menos en cierto sentido.
Personalmente creo que, aunque más caro también es cierto que el Volkswagen Polo que ves en pantalla sería una de mis opciones sino directamente la elección, al menos si incluimos en la ecuación el paquete deportivo R y faros de xenón. Un vehículo muy especial idóneo sobre todo para trayectos urbanos e interurbanos siempre que la frecuencia de estos últimos sea más bien baja.
Volkswagen Polo 1.4 TDI BMT 75 caballos
Fotos: SMJ