Mercedes continúa reestructurando su gama buscando una mayor rentabilidad de la misma. Una de las últimas víctimas que se cobró esa reestructuración fue el SLC, pero ahora vienen más: los Mercedes Clase S Coupé y Cabrio, que son los dos modelos de dos puertas más lujosos que podemos encontrar dentro de la firma y que dejarán el catálogo sin visos a tener un sucesor directo, algo que por otra parte no nos pilla desprevenidos puesto que ya llevábamos tiempo escuchando algunas informaciones al respecto. ¿Qué motivos podemos atribuir a que hayan tomado esa decisión? Fundamentalmente, el escalón considerable de ventas que existe entre el Clase S convencional y estas dos variantes que hace que no justifique la existencia de las mismas.
Y recalcamos directo, porque Mercedes pretende canalizar a toda esa clientela de ambos modelos al nuevo Mercedes SL que estará por llegar. Seguirá siendo un GT, pero eso sí, ahora adoptará un comportamiento más deportivo, además de aligerar su peso. Por lo tanto, no será en esencia lo mismo, ya que perderemos parte del lujo y refinamiento que podemos esperar de la punta de lanza como es el Clase S. Un punto positivo es que además su precio será inferior al del Clase S, siendo por tanto más accesible.
Por tanto, el SL así como el Mercedes-AMG GT pasarán a ser las puntas de lanza de dos puertas ya sea cabrio (SL) como coupé (GT), rivalizando así con modelos como el BMW Serie 8, Jaguar F-Type o Porsche 911. Por supuesto no faltará la participación de AMG en el SL, ya sea en su puesta a punto como en el posterior lanzamiento de una variante de mayores prestaciones del mismo.