El Range Rover Evoque continúa siendo todo un éxito de ventas tras haber transcurrido más de 2 años desde su lanzamiento, y pese a tener unos duros rivales en el segmento pertenecientes al trío alemán como son los Audi Q3, BMW X1 y próximamente, el Mercedes GLA, el Evoque ha sabido cosechar un éxito imparable en sus ventas.
Sin embargo, estos rivales también han ido introduciendo paulatinamente mejoras, y en Land Rover no quieren quedarse a la cola, así que para continuar con su éxito, han optado por la introducción de un mayor equipamiento destinado al apartado de seguridad, así como una nueva caja de cambios que mejora considerablemente la eficiencia del mismo.
Nueva caja de cambios ZF de 9 velocidades
Concretamente, se trata de la caja de cambios desarrollada por el especialista en transmisiones ZF con 9 velocidades, que asegura una mayor versatilidad para poder adaptarse mejor a los diferentes estilos de conducción, refinamiento y además, una mejor eficiencia. Concretamente, reduce su consumo medio homologado de media en un 11,4%, mientras que sus emisiones se reducen un 9,5%. La media de consumo de la gama actual es de 4,08l/100 km, mientras que las emisiones se sitúan en los 129 g/km. Los propulsores son los ya conocidos: 2.2 Diesel de 150 y 190 CV, junto con el gasolina de 2 litros y 240 CV.
Sin alejarnos del apartado técnico, continuamos con la tande novedades. Opcionalmente, podremos equipar el sistema ‘Active Driveline’, este sistema lo que hace es que si circulamos por encima de los 35 km/h y el sistema detecta que las condiciones son adecuadas, nuestro Evoque circulará exclusivamente con tracción delantera. En caso de detectar alguna pérdida de tracción, el sistema actúa en sólo 300 milisegundos para repartir el par entre ambos ejes. Si optamos por este sistema, también contaremos con el ‘Active Torque Blasing‘, un diferencial electrónico distribuye el par entre las ruedas del eje trasero. Así mismo, también se incorpora el sistema ‘Torque Vectoring by Braking’ que está disponible tanto en asociación con el Active Driveline como sin dicho sistema (con tracción 4×4, eso sí), que es un sistema de reparto vectorial del par en las cuatro ruedas.
En lo referente a sistemas de ayuda y seguridad para el conductor, se incorporan varios de ellos en este nuevo Model Year, como un sistema de reconocimiento de señales de tráfico (Traffic Sign Recognition), un sensor de vadeo (Wade Sensing), control de crucero adaptativo (ACC), alerta de cambio involuntario de carril (Lane Departure Warning), sistema para salir de forma automática de un estacionamiento en paralelo (parking exit), sistema para aparcar automáticamente en batería (Perpendicular Park), asistente de frenada de emergencia (IEB), entre otros.
Sin embargo, tampoco se ha dejado de lado el apartado estético, que se revisa muy sutilmente, eso sí, con la incorporación de cuatro nuevos diseños de llantas en el catálogo, emblema de «Range Rover» de nueva factura que encontramos en lugares como capó y portón trasero, así como más colores en la tapicería de su habitáculo.
Finalmente, de acuerdo a lo anunciado por Land Rover, las primeras unidades comenzarán a llegar a partir de Octubre, si bien, por el momento se desconocen las nuevas tarifas, que deberían darse a conocer a lo largo de las próximas semanas.
